Siempre me habéis leído por estos lares que existen personas que por su humanidad su tesón, su sacrificio, su entrega hacen que uno se sienta, no digo pequeño, que seria mucho, sino insignificante. Margarita Salas era este tipo de personas.

Tuve la ocasión de conocerla a través de mi Hermana Inmaculada, otra de ese tipo, y en ellas vi reflejada la grandiosidad del Ser Humano. Mantenían una conversación sobre la idoneidad de dar luz a la ciencia, de darle visibilidad, de conseguir concienciarnos a todos, el resto de la humanidad, que para salvarnos a nosotros, ellas necesitaban apoyo, cariño, comprensión y dinero.

Foto: Olga Ibáñez de Cáceres con Margarita Salas

Aquél día estaba acompañada, además de por mi hermana, por otra de sus hermanas en ciencia: Rosario Perona, otra de igual tipo y calidad. Y en todo ese tiempo que estuve al amparo de tan insigne sombra, no oí pedir nada para ellas..., sólo su preocupación por todos nosotros..., ellas no pedían nada, sólo respeto, visibilidad, medios, presupuesto y ayudas. Para ellas..., nada.

Hoy ha muerto Margarita Salas... esas hermanas en ciencia se quedan más solas y nosotros más abandonados.

Querida Inmaculada Ibáñez De Cáceres, hermana mía del alma, siento profundamente tu pérdida pero más siento la del resto del humilde mortal.

(1) La Dra. Inmaculada Ibáñez de Cáceres es Directora del Grupo “Terapias Experimentales y Biomarcadores en Cáncer” de IdiPAZ (Instituto de investigación biomédica del Hospital Universitario la Paz). Department: IdiPAZ INGEMM (Molecular and medical genetic Institute)