En estos 16 años que llevo dando clases a alumnos, no he encontrado hasta ahora ni un solo argumento que me permita defender una escuela en la que los chicos se eduquen en un aula y las chicas en otra aula. Diferencias entre ellos existen pero solo a nivel estadístico, sobre todo en sus gustos por las actividades extraescolares o hasta en los juegos del patio hay gustos muy marcados para ellos (el fútbol) y otros que les gusta más a ellas (como la comba). Y diferencias existen en las preferencias a la hora de elegir carrera (a los chicos ingenierías y a ellas medicina o enfermería). Pero también en el fútbol he visto chicas jugado, y en la comba también chicos jugando. Y en ingenierías veo numerosas mujeres, y en medicina también hombres. Por ello, tras 16 años dando clases, no he comprendido la ventaja. Los argumentos tampoco me cuadran, sobre todo porque entre las chicas hay tantísima variedad de capacidades como entre los chicos, y hay chicas que tienen mismos gustos y capacidades que determinados chicos, y chicos mismos gustos y capacidades que determinadas chicas. Si se fuera a segregar por gustos y capacidades, podría entender alguna lógica en esto, pero habría que cribar muy a conciencia y entonces llegaríamos a grupos mixtos de chicos y chicas con buenas aptitudes y capacidades, y grupos mixtos de chicas y chicos con capacidades normales, y grupos mixtos de chicos y chicas con menores aptitudes y capacidades.
Pero ya que veo a determinados obispos como Atilano Rodríguez alegrarse por el dictamen del constitucional, o al portavoz de la Conferencia Episcopal Española alegrarse también por dicho dictamen, me pregunto realmente que gana un colegio católico segregador, o unos alumnos con este tipo de enseñanza. Realmente, no veo que se gane nada, y lo peor es que le cuelgan una fea etiqueta al centro y a sus alumnos realmente por nada más que una idea absurda mal argumentada y falsamente sustentada. Señores obispos, la Iglesia con este tipo de enseñanza no va a ganar nada, y si quieren el consejo de este insignificante profesor sin licenciatura, mañana les aportaré en que debe segregar un colegio católico si quiere ayudar de verdad a sus alumnos.