El Vaticano ha decidido mostrarse activo y atento ante la emergencia de la rápida difusión del coronavirus Covid-19 por todo el territorio italiano, y que incluyó la semana pasada un positivo en uno de los hogares de la Santa Sede para los más necesitados.

Así, a las tempranas modificaciones de las agendas del Papa, como la realización solo vía streaming de audiencias y Ángelus, ahora fue el propio pontífice el que decidió ponerse en primera fila de la ayuda a paliar las consecuencias de la enfermedad que ya provocó más de 10.000 contagios en Italia.

Este jueves, el Vaticano anunció que, a raíz de la creciente preocupación por la propagación del contagio de Covid-19 en el territorio italiano, Francisco donó 100.000 euros a Cáritas Italiana, para una primera ayuda significativa en esta fase de emergencia.

A primera hora, Francisco había pedido rezar "por los gobernantes que deben tomar medidas contra el coronavirus", al celebrar su misa matutina en la residencia de Casa Santa Marta, convertida en el único oficio religioso permitido en toda Italia por las medidas para frenar la difusión del Covid-19.

"Continuamos rezando juntos, en este momento de pandemia, por los enfermos, por los familiares, por los padres con hijos en casa", expresó el pontífice en su homilía.

Las misas matutinas de Francisco, sin público y transmitidas en directo por el Vaticano, son desde la semana pasada la única celebración religiosa permitida en toda Italia, donde hasta el 3 de abril se frenaron las actividades como misas y funerales.

Rezar por las autoridades

"Pero sobretodo quiero pedirles que recen por las autoridades, ellos deben decidir y tantas veces decidir sobre medidas que no le gustan al pueblo", planteó Jorge Bergoglio, horas después de que el premier italiano, Giuseppe Conte, anunciara el cierre total de bares y restaurantes en todo el territorio hasta el 25 de marzo.

"Pero es por nuestro bien. Y muchas veces, la autoridad se siente sola. Oramos por nuestros gobernantes que deben tomar la decisión sobre estas medidas: que se sientan acompañados por las oraciones de la gente", agregó Francisco.

En medio de la difusión del virus, que ha causado más de 10.000 contagios en Italia, el Vaticano instrumentó una serie de medidas para frenar la propagación, como la cancelación de las audiencias públicas del Papa y la transmisión por streaming de sus discursos para evitar aglomeraciones en la Plaza San Pedro.

Dicasterios abiertos

Al mismo tiempo, los distintos dicasterios de la Santa Sede permanecerán "abiertos para asegurar servicios esenciales a la Iglesia Universal, en coordinación con la Secretaría de Estado", como forma de no detener la maquinaria vaticana.

En un comunicado, la Oficina de Prensa de la Santa Sede informa que la labor de los dicasterios continúa "en el respeto" de las normas sanitarias y los "mecanismos de flexibilidad en el trabajo" establecidos en días pasados.

Por su parte, un documento de la Secretaría de Estado, distribuido al final de una reunión interdicasterial realizada en el Aula Nueva del Sínodo presidida por el cardenal Pietro Parolin, se detiene en la "evolución de la situación de emergencia sanitaria" invitando a los "entes de la Santa Sede o a ella vinculados, así como a la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano" a "identificar los servicios y puestos esenciales con el fin de garantizar el funcionamiento mínimo de los mismos".

Cuidar de los más pobres

Al mismo tiempo, el limosnero Konrad Krajewski, anunció que el Vaticano no cerrará los servicios de duchas para los pobres y seguirá repartiendo comida entre los más necesitados que duermen bajo los portales de Roma pese a la emergencia del coronavirus, si bien ha dispuesto nuevas modalidades de actuación entre los voluntarios por precaución.

"Respetando las reglas impuestas por la emergencia con inteligencia evangélica, continuamos yendo por las calles para dar de comer a las personas sin hogar. En estos días corremos el riesgo de pensar solo en nosotros mismos. Pero, ¿y los pobres? Para ellos es todo más difícil. No debemos y no podemos olvidarnos de tener la mano al que sufre y está solo", anunció la Limosnería en un comunicado.