Pérez Pueyo invita al Opus a "que se regule cuando antes la situación jurídica, canónica y pastoral" Barbastro confirma que José Mairal será, desde el 1 de septiembre, nuevo rector de Torreciudad

Tras la tempestad, la (aparente) calma. El pasado domingo, el obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez Pueyo, dio un golpe de mando en la polémica en torno a Torreciudad. Durante la fiesta de la Virgen, a la que también asistió (en un gesto de distensión) el vicario de la Obra en España, Ignacio Barrera, el prelado hizo tres gestos que marcarán el futuro inmediato del santuario.

En primer lugar, ceder la homilía al futuro rector, José Mairal -que, tal y como confirma la diócesis, será rector de manera efectiva a partir del 1 de septiembre, coordinando un equipo en el que también estarán los clérigos del Opus que viven en Torreciudad-, como símbolo de su autoridad; en segundo lugar, como gesto de continuidad, que la lectura anterior a la homilía, la del Evangelio, corriera cargo al todavía rector, Ángel Lasheras; y, en tercer lugar, sus palabras al término de la celebración, y antes de la procesión solemne.

"Con humildad y sencillez, afirmar que hemos procedido – en relación con el nombramiento del nuevo rector- siempre de forma colegial, acorde a Derecho, pero sobre todo intentando impulsar ese Proyecto Mariano Evangelizador que tantas veces habéis visualizado con vuestras peregrinaciones", recalcó Pérez Pueyo, quien insistió que "desde el Obispado de Barbastro-Monzón siempre encontraréis la mano tendida. Siempre la hemos tenido a la Prelatura para ayudar a que se regule cuando antes la situación jurídica, canónica y pastoral".

Aunque oficialmente el Opus Dei sigue barajando la posibilidad de acudir a los tribunales eclesiásticos para impedir la toma de posesión de Mairal, fuentes cercanas a la polémica auguran que, en los próximos días, podría haber "un gesto" de conciliación por parte de la Obra, y abriéndose a culminar las conversaciones -iniciadas ya hace tiempo, y cortadas de manera abrupta ante la negativa de la prelatura a responder las reiteradas peticiones del obispo- para que la sangre no llegue al río.

Refiriéndose a unas palabras de Escrivá de Balaguer, 'Abrid las ventanas', Pérez Pueyo culminaba sus palabras a los miembros de la Obra: "Hoy me atrevo con sencillez y todo el cariño a invitaros a cantar desde el fondo del corazón: abrid las ventanas, es primavera. Hoy el Señor os invita a los que estamos aquí y a los que venís de fuera a sentir que la Iglesia os necesita. Por lo tanto yo dejo estas dos palabras: oportunidad y regularizar. No hay más. Que la Virgen de Torreciudad nos ayude a mirar más lejos, más alto". La solución -o el comienzo de la misma-, en los próximos días.