En su carta semanal ante la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación Demetrio carga contra la Agenda 2030 y los grupos "de inspiración marxista" que "idolatran la naturaleza"
El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha lamentado que "el hombre contemporáneo, olvidado de Dios, ha olvidado el destino de la creación" de Dios, "y la usa indiscriminadamente, abusando de ella y destruyéndola muchas veces", mientras que, "como reacción, han surgido con fuerza algunos movimientos de izquierdas, de inspiración marxista, que reivindican el cuidado de la naturaleza, llegando incluso a idolatrarla"
El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha lamentado que "el hombre contemporáneo, olvidado de Dios, ha olvidado el destino de la creación" de Dios, "y la usa indiscriminadamente, abusando de ella y destruyéndola muchas veces", mientras que, "como reacción, han surgido con fuerza algunos movimientos de izquierdas, de inspiración marxista, que reivindican el cuidado de la naturaleza, llegando incluso a idolatrarla".
La consecuencia de ello, según ha argumentado Demetrio Fernández en su carta semanal, recogida por Europa Press, es que "somos hoy víctimas de esas posturas extremistas, que condicionan los gobiernos mundiales en una serie de medidas que asfixian al hombre. Ahí está también la Agenda 2030, implacable en una serie de aspiraciones en este campo".
A este respecto, el obispo ha recordado en su carta que el próximo 1 de septiembre, "que este año cae en domingo, es la 'Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación', instituida por el Papa Francisco en 2015 para alentar el cuidado de la creación en todos los católicos, y en toda persona de buena voluntad".
https://t.co/44fhi1P9wU 🌎 La carta semanal del @ObispoDemetrio ▶️ en vídeo
— Diócesis de Córdoba (@diocesiscordoba) August 29, 2024
Se trata, según ha explicado, de "caer en la cuenta de que el mundo que nos rodea y en el que habitamos es obra de la acción creadora de Dios, que lo ha hecho todo de la nada, como un acto generoso de creación, en la que expresa su gloria y su amor por nosotros, y en la que ha creado al hombre para que sea el virrey de esa creación".
El trabajo en favor de la casa común (ecología) que Dios nos ha regalado, la creación en la que vivimos, tiene un profundo sentido religioso
Así, "la Iglesia Católica ama la naturaleza porque es obra de su Señor, del creador de todo lo visible y lo invisible. Recibe la naturaleza como un don de Dios al hombre, la considera obra de Dios, es creación suya y asume el encargo de cuidarla", siendo esa "la perspectiva cristiana del que mira la creación con ojos de fe, y le duele tremendamente el destrozo que el hombre está causando a diario sobre esa naturaleza creada, a todos los niveles. Eso le lleva a comprometerse seriamente en esta causa".
En consecuencia, según ha señalado el obispo de Córdoba en su carta, "el trabajo en favor de la casa común (ecología) que Dios nos ha regalado, la creación en la que vivimos, tiene un profundo sentido religioso y está inserto en una tarea de redención y de liberación de las garras del demonio y del hombre destructor".