Debate sobre la eutanasia en el Congreso de los Diputados El Observatorio de Bioética de la UCV asegura que "hay que eliminar el dolor del paciente, no su vida"
Presenta un informe médico, jurídico y moral sobre las proposiciones de Ley de PSOE y UP
Rebate los argumentos de ambos partidos y apuesta por invertir en cuidados paliativos
| Universidad Católica de Valencia
Ante el comienzo del debate en el Congreso de los Diputados de las proposiciones de Ley sobre la eutanasia presentadas por el PSOE y Unidas Podemos (UP), el Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia (UCV) ha presentado el informe La eutanasia que nos llega, en el que se analizan los distintos aspectos de las propuestas de ambos partidos desde una perspectiva médica, jurídica y moral. El director del Observatorio, Justo Aznar, resume la apuesta de los expertos de la UCV por los cuidados paliativos frente a la opción de la eutanasia y el suicidio asistido: “Debemos eliminar el dolor del paciente, no eliminar al paciente para eliminar el dolor”.
En ese sentido, el director del Observatorio de la UCV manifiesta su “sorpresa” ante el hecho de que el Parlamento español haya pospuesto el debate sobre la proposición de Ley de cuidados paliativos de Ciudadanos y, en cambio, se debata antes una ley de la eutanasia.
“En el estado actual de la medicina y la práctica clínica, los recursos para eliminar el dolor existen, son eficaces para aliviar el sufrimiento de los enfermos crónicos o terminales y constituyen, a través de los cuidados paliativos de calidad, la herramienta que procura el trato digno que toda persona merece en atención a su inviolable dignidad, máxime cuando padece un estado de dependencia absoluta”, reza el informe del equipo liderado por Aznar.
Los expertos de la UCV consideran que abordar el sufrimiento humano pretendiendo eliminar a las personas que lo padecen es, ante todo, “un fracaso del sistema asistencial”
Por ello, los expertos de la UCV consideran que abordar el sufrimiento humano pretendiendo eliminar a las personas que lo padecen es, ante todo, “un fracaso del sistema asistencial”, pero también “de la sociedad moderna” que, “lejos de suprimir a los débiles y sufrientes, debería dedicarles los mejores esfuerzos y recursos disponibles, precisamente porque son los que más los necesitan”.
“La legalización de prácticas como la eutanasia y el suicidio asistido pretende mostrar como un bien un proceder del todo inaceptable, tanto médicamente como desde una perspectiva bioética, basada en el respeto a la dignidad humana y su defensa en toda circunstancia”, se insiste en el informe.
No existen datos objetivos que hablen de demanda social
El texto del Observatorio responde así al argumento del dolor intolerable que esgrimen ambas proposiciones de Ley UP. Pero no es el único de los argumentos presentados por PSOE y UP que rebate el informe de la UCV, todos ellos son analizados y descartados como insuficientes.
Así, ante la justificación de una ley sobre eutanasia del PSOE como una respuesta a la demanda que existe de ella en la sociedad, los expertos en bioética de la UCV arguyen que tal petición “no aparece como uno de los problemas prioritarios de los españoles en las encuestas del CIS, ni en el INE, por lo que se puede decir que no existen datos objetivos para afirmar que la eutanasia sea hoy día una demanda social”.
Igualmente, el proyecto de ley socialista afirma que es necesario legalizar la eutanasia porque así sucede en los países del entorno, lo que es “infundado”, pues de los 29 países que constituyen la Unión Europea, la eutanasia y el suicidio asistido solamente están legalizados en tres: Holanda, Bélgica y Luxemburgo; y el suicidio asistido, en Suiza.
Por otra parte, “de los 51 estados norteamericanos, el suicidio asistido solamente está legalizado en tres de ellos y la eutanasia en seis, siendo en todos los restantes ilegal. También está legalizada en Canadá”.
El valor de la vida
De igual manera el informe hace referencia a la propuesta de UP, en la que prevalece la “autonomía” en la solicitud de la eutanasia de los pacientes sobre el valor de la vida humana: “Conviene tener presente que el ejercicio de la autonomía solamente es lícito éticamente si al ejercerla se persiguen fines lícitos, es decir, orientados hacia el bien del sujeto (beneficiencia) y no a provocarle un daño (maleficiencia)”.
“Cuando una persona decide suicidarse, la sociedad no admite esa decisión; la llevamos al hospital si se ha tragado un bote de pastillas y allí se le hace un lavado de estómago para salvar su vida. Es decir, hacemos que prevalezca la vida de esa persona frente a su deseo de suicidarse. En mi opinión, la autonomía no debe prevalecer sobre el derecho a la vida”, puntualiza Aznar.
Además, el director del Observatorio indica que instituciones profesionales especializadas como el Colegio General de Médicos manifiestan que el médico “nunca provocará intencionadamente la muerte de un paciente, ni siquiera en caso de petición expresa de éste (Cod Deontológico, Art. 36, apartado 3)”.