El cardenal de Madrid y vicepresidente de la Conferencia Episcopal, Carlos Osoro, acaba de recibir la primera dosis de la vacuna de Pfizer frente al coronavirus en su centro de salud. Y lo ha hecho lanzando un mensaje de unidad y solidaridad con los más necesitados. A sus 75 años, el purpurado ha seguido el protocolo sanitario, esperando a que llegara su turno.
"Acabo de recibir la primera dosis de la vacuna frente al coronavirus. Agradezco el trato de los sanitarios y pido para que esta sea accesible para todos en el mundo entero, especialmente para los vulnerables", señala en sus redes sociales el purpurado.
"Como experimentamos esta Pascua, el dolor no tiene la última palabra", recalca Osoro. Como también hiciera ayer el cardenal Cañizares, frente a los 'vacunajetas', responsabilidad.
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