Dos semanas después de que lo pidiera el obispo, Ángel Pérez Pueyo, la Santa Sede toma las primeras medidas en Torreciudad, y ha nombrado a Alejandro Arellano Cedillo, decano del Tribunal de la Rota Romana, comisario pontificio plenipotenciario y delegado de la Santa Sede para el "complejo de Torreciudad". Arellano es miembro de la Confraternidad de Operarios Diocesanos del Reino de Cristo

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La medida se toma dentro del escándalo que, desde hace meses, se vive en el oratorio-santuario, y después de que fracasaran todos los intentos por encontrar una solución entre la Obra y la diócesis. Tal y como puede adelantar RD, el obispo fue informado el pasado lunes durante una reunión en Nunciatura. El Opus Dei también fue informado.

La decisión, en principio, viene a validar las pretensiones del obispo de Barbastro-Monzón, que en las últimas semanas se ha visto asediado desde sectores ultracatólicos. De hecho, algunas fuentes sugerían que, una vez intervenido Torreciudad, el siguiente paso sería el cese de Pérez Pueyo. Algo que no parece que vaya a suceder.

Desde este momento, como plenipotenciario, Arellano tendrá toda la fuerza para investigar y tomar decisiones ejecutivas que afecten al santuario fundado por Escrivá de Balaguer. También, para acceder a todas las cuentas y balances históricos del santuario.

Consultada por Religión Digital, la diócesis de Barbastro-Monzón se remite al comunicado emitido hace dos semanas en el que, como adelantó este portal, esta sede aragonesa se ponía en manos de la Santa Sede para la resolución de este litigio. En una nota posterior, el portal Iglesia en Aragón confirma lo adelantado por RD, que "tanto la Prelatura del Opus Dei como el Obispado de Barbastro-Monzón fueron notificados este lunes de la designación de monseñor Arellano como comisario con plenos poderes en Torrreciudad".

Finalmente, el Obispado, en nota oficial, "agradece la rápida respuesta a su solicitud, reitera su absoluta confianza en las resoluciones de la Santa Sede y se pone a disposición del Comisario Pontificio, con quien colaborará en todo aquello que sea necesario"

"El Obispado de Barbastro-Monzón tiene plena confianza en alcanzar con esta intervención la resolución de este asunto que constituye una oportunidad para regularizar el estatus de Torreciudad y erigirlo, canónicamente, como santuario", añade la nota, citando el comunicado emitido hace dos semanas por la diócesis, y apunta que "la designación del eclesiástico toledano por la Santa Sede responde a su r eputada trayectoria como jurista y al hecho de ser español, además de estar al frente del tribunal eclesiástico de más alto rango de la Iglesia católica, con permiso del Tribunal Supremo de Doctrina de la Fe".

Por su parte, la Obra manifiesta lo siguiente: "Las autoridades de la Prelatura estarán a total disposición de Mons. Arellano, colaborando en lo que sea necesario, con filial adhesión al Santo Padre"

Doctor en Derecho Canónico por la Gregoriana

Nacido en Olías del Rey (Toledo) el 8 de junio de 1960, Arellano realizó sus primeros estudios eclesiásticos en el Instituto Teológico San Ildefonso, de Toledo, recibiendo la ordenación sacerdotal en la capital castellana en 1987.

Miembro de la Confraternidad de Operarios Diocesanos del Reino de Cristo, es doctor en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, licenciado en Estudios Eclesiásticos por la Facultad de Teología de Burgos y auditor de la Congregación para las Causas de los Santos.

Desde 2007 es prelado auditor del Tribunal de la Rota Romana. Ha sido auditor de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España, y ha impartido clases en la Universidad San Pablo CEU y en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.

Ha sido vicario judicial adjunto en la archidiócesis de Madrid, juez diocesano en primera y segunda instancia en la archidiócesis de Toledo y juez diocesano en la diócesis de Getafe. Miembro de la Comisión Especial de la Congregación del Clero y Consultor de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada, tiene diversas publicaciones en el ámbito del Derecho Canónico.

Decano del Tribunal de la Rota Romana desde el 30 de marzo de 2021, el pasado 2 de febrero la Santa Sede hacía público su nombramiento episcopal, con el título de obispo de Bisuldino, según Archimadrid.