Ante los 75 años de Zornoza, que cumple hoy, por lo que ha de presentar su renuncia Queremos un nuevo obispo para Cádiz con "olor a oveja", no un gestor inmobiliario

El 31 de Julio el obispo de Cádiz y Ceuta Rafael Zornoza cumple 75 años, la edad de su jubilación como obispo. Estamos por tanto a la espera de un nuevo obispo para la diócesis, que esperamos sea cuanto antes.

Desde que el obispo llegó a la diócesis en 2011, su gestión ha estado marcada por los conflictos numerosos en casi todas las zonas de la diócesis, como han venido recogiendo los medios de comunicación. Baste recordar la información que el diario “Público” difundía el 14 de junio de 2021. 

Denuncias del obispo a dos párrocos dejándoles sin funciones hace ya 6 años por ser críticos con su gestión económica y juzgarla públicamente como contrarias al espíritu evangélico y denuncias obligadas de ellos ante los tribunales, eclesiásticos y civiles para poder defenderse, numerosos despidos de trabajadores en Cáritas, Seminario, Obispado, parroquias etc... desahucios de personas de sus locales comerciales y viviendas, problemas con las capellanías de Vejer, gestionadas desde el siglo XVI por las parroquias y que pasaron a ser gestionadas por el Obispado, diversas operaciones inmobiliarias, dando el obispo la imagen de ser más un empresario inmobiliario que de un obispo, falta de diálogo y sintonía con la mayor parte de sus sacerdotes, y falta de actuaciones concretas ante los muy graves problemas sociales de la diócesis, como la falta de vivienda para desahuciados, personas sin hogar, inmigrantes…, como ya le dijimos al obispo al poco tiempo de llegar a la diócesis...

Toda esta situación provocó que nuestro Grupo enviara a Roma, a la Conferencia Episcopal, al Nuncio, cartas apoyadas por más de 350 firmas pidiendo un visitador pontificio para la diócesis, para que hablara con todas las personas afectadas y comprobara la veracidad de lo que le decíamos y con nuestro Grupo, testigo directo del sufrimiento de todas estas personas a las que hemos apoyado dentro de nuestras posibilidades.

También, ante la próxima jubilación del obispo, hemos enviado hace varios meses escritos al Dicasterio para el nombramiento de Obispos en Roma, informándole de la situación en la diócesis y pidiéndole con urgencia un nuevo obispo para Cádiz que tuviera un perfil de persona más dialogante con todos los sacerdotes y sectores de la diócesis, con las comunidades eclesiales de base y los movimientos sociales y que fuera sensible a los muy graves problemas que tenemos: paro, vivienda, inmigración, personas sin hogar, desahuciados, desindustrialización, que sea austero en su forma de vida y que fomente el sentido sinodal, como pide Francisco y la participación activa de laicos y mujeres en las estructuras diocesanas. En definitiva, queremos un obispo “con olor a oveja” y no un gestor inmobiliario, apartado de los problemas de la gente.

Con estos sentimientos expresamos nuestro deseo de que se nombre lo más pronto posible un nuevo obispo para la diócesis de Cádiz y Ceuta, ahora que Zornoza cumple ya 75 años.