EEUU, más polarizado que nunca por el debate sobre la libertad religiosa
Nueva encuesta del Pew Research Center
Solo el 20% afirman simpatizar con partidarios y detractores de los seguros médicos, las "leyes baño" o el matrimonio homosexual
Una nueva encuesta del Pew Research Center demuestra que el público estadounidense está más polarizado que nunca respecto al debate entre la libertad religiosa y la protección de los derechos civiles librándose actualmente en este país.
Solo un 22% de los ciudadanos preguntados por este sondeo afirman poder ver los argumentos en pro y en contra de que el Estado obligue a los empresarios a incluir anticonceptivos en los seguros médicos que ofrecen a sus empleados, por ejemplo.
El sondeo recoge las opiniones de 4.538 adultos, incluidos 817 católicos, de los cuales el 60% van a misa semanalmente. Se les preguntó por sus pareceres respecto a cuestiones de suma relevancia en la actualidad del país tales como los seguros médicos promovidos por la administración de Obama, el matrimonio homosexual y las llamadas "leyes baño" que regulan el acceso de transexuales a aseos públicos y el matrimonio homosexual.
En lo que a la inclusión de anticonceptivos en la cobertura médica se refiere, el 67% de los encuestados piensa que debe ser obligatoria, aún cuando el empresario tenga algún reparo religioso al respecto. Solo el 30% respaldó el derecho del propietario de acogerse a una objeción de conciencia. Y es que ese rechazo a que los empresarios queden exentos de tener que ofrecer este servicio a sus empleados ciertamente tiene que ver con la ya amplia aceptación de los controles artificiales de la natalidad en los EEUU. Solo el 4% de los estadounidenses ya ven su uso como un mal moral, porcentaje que sube a un mero 13% entre el colectivo católico. El 36% del público en general y el 45% de los católicos considera los métodos artificiales de control de la natalidad moralmente aceptable.
En lo referido al matrimonio homosexual -legalizado por el Tribunal Supremo en junio del año pasado- se les preguntó a los participantes por si negocios especializados en bodas debieran poder denegar sus servicios a novios del mismo sexo. Entre el público católico el 54% cree que estos establecimientos no deberían poder discriminar a ninguna pareja en función de su identidad sexual: mayoría que baja ligeramente, en caso del público en general, hasta el 49%.
En cuanto a las "leyes baño", por último, el 51% de los estadounidenses aprueban que los transexuales usen el aseo del género que hayan adoptado, mientras que el 46% cree que deben usar el que les corresponda por nacimiento.
De entre todos estos datos reveladores, no obstante, hay tres que destacan: la escasa proporción de ciudadanos que aseveran simpatizar con los dos lados de los debates, alrededor del 20% en los tres casos analizados. A un mes escaso de las elecciones, quien salga elegido presidente del país tendrá que enfrentarse a una sociedad cortada en canal entre los partidarios de la libertad religiosa y de la no discriminación.
Solo el 20% afirman simpatizar con partidarios y detractores de los seguros médicos, las "leyes baño" o el matrimonio homosexual
Una nueva encuesta del Pew Research Center demuestra que el público estadounidense está más polarizado que nunca respecto al debate entre la libertad religiosa y la protección de los derechos civiles librándose actualmente en este país.
Solo un 22% de los ciudadanos preguntados por este sondeo afirman poder ver los argumentos en pro y en contra de que el Estado obligue a los empresarios a incluir anticonceptivos en los seguros médicos que ofrecen a sus empleados, por ejemplo.
El sondeo recoge las opiniones de 4.538 adultos, incluidos 817 católicos, de los cuales el 60% van a misa semanalmente. Se les preguntó por sus pareceres respecto a cuestiones de suma relevancia en la actualidad del país tales como los seguros médicos promovidos por la administración de Obama, el matrimonio homosexual y las llamadas "leyes baño" que regulan el acceso de transexuales a aseos públicos y el matrimonio homosexual.
En lo que a la inclusión de anticonceptivos en la cobertura médica se refiere, el 67% de los encuestados piensa que debe ser obligatoria, aún cuando el empresario tenga algún reparo religioso al respecto. Solo el 30% respaldó el derecho del propietario de acogerse a una objeción de conciencia. Y es que ese rechazo a que los empresarios queden exentos de tener que ofrecer este servicio a sus empleados ciertamente tiene que ver con la ya amplia aceptación de los controles artificiales de la natalidad en los EEUU. Solo el 4% de los estadounidenses ya ven su uso como un mal moral, porcentaje que sube a un mero 13% entre el colectivo católico. El 36% del público en general y el 45% de los católicos considera los métodos artificiales de control de la natalidad moralmente aceptable.
En lo referido al matrimonio homosexual -legalizado por el Tribunal Supremo en junio del año pasado- se les preguntó a los participantes por si negocios especializados en bodas debieran poder denegar sus servicios a novios del mismo sexo. Entre el público católico el 54% cree que estos establecimientos no deberían poder discriminar a ninguna pareja en función de su identidad sexual: mayoría que baja ligeramente, en caso del público en general, hasta el 49%.
En cuanto a las "leyes baño", por último, el 51% de los estadounidenses aprueban que los transexuales usen el aseo del género que hayan adoptado, mientras que el 46% cree que deben usar el que les corresponda por nacimiento.
De entre todos estos datos reveladores, no obstante, hay tres que destacan: la escasa proporción de ciudadanos que aseveran simpatizar con los dos lados de los debates, alrededor del 20% en los tres casos analizados. A un mes escaso de las elecciones, quien salga elegido presidente del país tendrá que enfrentarse a una sociedad cortada en canal entre los partidarios de la libertad religiosa y de la no discriminación.