Notre-Dame de Paris: arte y vida de los "godos" (gótico) Notre-Dame, Nuestra-Dama: La Catedral de Europa
No se trata de restaurar, sino de recrear

Antes no había Europa Occidental sino cristiandad, con un mismo estilo de fondo, desde Compostela hasta Siria y Armenia, pasando por Constantinopla, con la Catedral de Santa Sofía, la Madre de todas las Catedrales, desde Justiniano. Roma estaba al margen, los germanos seguían con su románico universal (catedrales del imperio: Worms, Maguncia...). Pero en Francia, en París, comenzó lo nuevo, el arte y vida de los godos (lo góticos).
Empieza el Gótico precisamente en Paris, como expresión del esfuerzo creador de unos hombres y mujeres que quieren construir un tipo de humanidad poderosa, que se va a materializar el catedrales y universidades, en conquistas que se abran a todo el mundo... Ha terminado la cristiandad universal, empieza el cristianismo occidental, guiado por Francia.
Francia ha respondido de un modo soberbio, empeñándose en restaurar Notre-Dame, como signo de cultura e identidad francesa, abierta al mundo entero, pues Notre-Dame es de algún modo la cátedra cultural más importante de los ocho siglos de Europa, que nacen con ella (y con la Sorbona, que crece a su lado).
Ciertamente, me interesa la reconstrucción de la Catedral de Notre-Dame, en su más bello estilo, quizá sin la "flecha" añadida en el dudoso neo-gótico por Viollet-le-Duc, en el siglo XIX... Pero más me interesa la reconstrucción de un cristianismo originario y universal, nuevo y evangélico... Y con esa ocasión ofrezco las reflexiones que sigue.
Siglo XIII, la era de las catedrales góticas


Un signo distintivo del siglo XIII es la nueva arquitectura, que marca el paso de los edificios anteriores, de tipo romano (románico), más propios de monasterios y santuarios, a las grandes catedrales, con altas torres (de estilo godo: gótico), que marcarán desde ahora la vida de las ciudades cristianas, que se edifican en torno a ellas, creando o centrando un tipo de existencia urbana, que definirá el cristianismo de los próximos siglos.
Antes, hasta finales del siglo XII, las iglesias-catedrales y templos de Europa occidental eran semejantes a los de Europa oriental, de manera que se podía hablar de una misma cristiandad desde Compostela hasta Siria o Armenia, pasando por Constantinopla, donde se hallaba la madre de todas las catedrales, Santa Sofía.
Pero en la segunda mitad del siglo XII comienza un estilo nuevo de vida occidental, llena de audacia y poder, representada por el estilo "gótico", es decir, de los godos (los bárbaros). Ese nuevo poder del occidente europeo rompe con el pasado, se desgaja del "románico" o romano anterior, que unificaba a toda la cristiandad... Comienza la nueva cristiandad y su signo principal, es Notre-Dame de París, la madre de todas las nuevas catedrales góticas.
Un tema complejo, social y religioso.
No hay una fecha exacta de nacimiento de las catedrales góticas, ni se puede fijar el año de su construcción, pues, en general, ellas se han ido edificando a lo largo de decenios (a veces de siglos), generalmente sobre el lugar de templos anteriores más pequeños. Pero, como he dicho, el signo y modelo de ese nuevo tipo de construcciones de "godos" (góticos) lo marca la Catedral de Paris.
Las nuevas catedrales góticas son un prodigio de técnica y conocimiento de los espacios y de los materiales, siendo, al mismo tiempo, expresiones de fe y signos del poder creador (quizá más: dominador) de los cristianos occidentales, que quieren visibilizar su presencia externa a través de sus grandes edificios. Este nuevo estilo gótico se origina básicamente en Francia y se extiende luego por toda Europa occidental (distinguiéndose del estilo de construcción anterior, marcado por las basílicas de Roma o por Santa Sofía de Constantinopla).
Etapas y estilos básicos. Pueden distinguirse cuatro etapas básicas.
1. Gótico primitivo o protogótico, que se deriva de las iglesias del Císter, partiendo de los elementos románicos anteriores. En esa línea se sitúa Notre-Dame de París, de la segunda mitad del siglo XII y principios del XIII, que puede considerarse como “madre” de las catedrales góticas, comienzo y signo de una nueva cristiandad de poder, que se ha mantenido hasta el día de hoy (siglo XXI) con sus inmensos valores, pero también con sus riesgos. En ese sentido, todos los cristianos occidentales modernos venimos de algún modo de Notre-Dame de Paris (con su dura historia de triunfos de iglesia y de revoluciones)
2. Gótico clásico (de la primera mitad del siglo XIII), representado por la catedral de Chartres (y las de Reims, Amiens etc.), con grandes ventanales que convierten los muros en espacio de transparencia de luz y color. Éste es el gótico-gótico, el triunfo de la altura y transparencia, de la filigrana de la piedra y de los huecos coloridos de las vidrieras del cielo y de la tierra, de los santos, del ensueño del paraíso
3. Gótico manierista, o más complejo, que comienza en la segunda mitad del siglo XIII y continúa a lo largo del XIV, con elementos arquitectónicos más estilizados, con la nave central muy luminosa y grandes rosetones, como en las catedrales de Inglaterra y en las primeras de España (Burgos, León, Toledo…). Éste es para muchos el más bello de los góticos, cuando el nuevo estilo cristiano occidental sale de Francia y se afianza en países del entorno, cada uno con sus rasgos especiales... Más sobrio el inglés, más recargado el hispano..
4. Gótico tardío. Se sigue utilizando en la segunda mitad del siglo XIV e incluso en el XV, con elementos de procedencia diversa, hasta comienzos del renacimiento. Éste es el momento de las grandes catedrales españolas (de Sevilla a Segovia o Salamanca) y de otras muy significativas como las de Milán y Colonia, que han tardado siglos en terminarse.

Todo Europa se hace gótica
El gótico es un arte y un estilo de vida que se impone en el conjunto de Europa occidental y que, de alguna forma, la unifica, con la excepción del centro y sur de Italia, donde el estilo anterior (de tipo clásico, románico o bizantino) era muy fuerte y pervivió hasta el renacimiento.
El gótico triunfa y se expande desde Francia, extendiéndose en España e Inglaterra, y también en Alemania y los países católicos de Europa Central, como signo de un cristianismo consciente de su poder social.
El triunfo del gótico resulta inseparable de la nueva cultura burguesa y del nacimiento de las ciudades, que se extienden en torno al gran templo catedralicio. Tanto como la comunidad que se reúne en oración, importa ahora el tempo, como signo de la nueva identidad cristiana de la sociedad donde, por encima de los reyes y los nobles, se eleva la Iglesia.
Reparar Notre-Dame, recrear la historia de Europa

Francia ha respondido como un resorte al reto de reparar la Catedral de Notre-Dame, no sólo como iglesia cristiana, sino como signo del "poder de Francia" sobre el conjunto de la Europa Occidental "gótica", cristiana. Lo que se haga con Notre-Dame puede ser un signo de lo que se haga con Europa, en plano cristiano y "gótico" (y en un plano post-gótico, sin olvidar el barroco...).
Notre-Dame es una parte de mi pasado y presente cristiano. Pero quiero que sea también, al mismo tiempo, un signo de un futuro de cultura universal humana, donde el signo de la Dama-María pueda ayudarnos a entender y ser lo que somos, en apertura a todos los hombres y mujeres de la tierra, en respeto, igualdad y comunión de vida.
No puedo entrar aquí en temas técnicos de arquitectura, aunque personalmente suprimiría la flecha central destruida, una flecha central neogótica, construida en el siglo XIX por Eugène Viollet-le-Duc a partir de de 1845, encabezando un proyecto de recreación.
Imágenes:
- Incendio y caída de la Flecha de Viollet-le-Duc
- Notre-Dame antigua sin flecha... y después conflecha (siglo XIX)
- Los bomberos recuperan una imagen de una Virgen de Pagánica (Abruzzo, 2009), que muchos medios han atribuido a Notre-Dame de Paris.
- La imagen de la Virgen de Notre-Dame (o de Paris) ha aparecido intacta entre los escombros