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Las monjas del Convento del Sagrado Corazón de Bangkok trabajan sin tregua para confeccionar las dos túnicas con seda tailandesa y bordadas a mano que el Papa Francisco lucirá durante su visita a Tailandia, entre el 20 y 23 de noviembre.
"Estoy encantada, feliz y orgullosa de servir al Papa", declaró este lunes a Efe la hermana Sukanya, una de las siete religiosas que junto a otras diez modistas voluntarias han tardado alrededor de dos meses en confeccionar la ropa para el Papa Francisco y otras 200 túnicas y estolas para los obispos que participen en la visita.
El pontífice lucirá dos mantos, uno de color dorado, durante la misa multitudinaria en el Estadio Nacional el día 21 y para la que se espera una asistencia de unos 50.000 fieles, y otro de color rojo en la homilía en la catedral de Asunción del día 22.
El diseño, creado por el cardenal Kriengsak Kovitvanit, muestra sobre el cuello y a la altura del pecho con hilos dorados los dibujos que utiliza el patrón Kanok, el más importante del arte tradicional tailandés.
Tras concluir el trabajo, las hermanas mandarán este martes las ropas a la tintorería para que así queden perfectas para la llegada a Tailandia del pontífice.
El Papa Francisco además mantendrá audiencias con el rey de Tailandia, el primer ministro y el patriarca de la sangha budista, antes de partir a Japón el sábado para continuar su gira.