¡No pierdas la Paz, por lo que no es la Paz!
No pierdas la paz, por todo lo que está fuera de ella.Dirígete al buen Jesús y ya te ha vuelto salvar.
¡Soy el pordiosero de Dios!
¡Hazme menor como el polvo!Como la tierra mojada que se mezcla con el agua Y luego se diluye, se invisibiliza y se pierde.
¡No busques a Jesús entre los muertos, está entre los Vivos!
Está vivo en las familiasY en las familias rotasY en las parejas comprometidas y en las que están sufriendo.
¡Padre, No me dejes que caiga en la tentación!
¡Querías amar a Jesús! Y ahora empiezas a amar la Cruz Que para eso nacemos Y cuando lo sabemos y aceptamos Entendemos un poco más la sabiduría del corazón de Jesús, mi Padre.
