“No son algunos niños. Son decenas de miles”, señala Joseba Segura El obispo de Bilbao denuncia la explotación infantil en las minas de cobalto en RD del Congo
"Aquí -explica Segura– se está viviendo un drama que tiene mucho que ver con algunos objetos que consideramos imprescindibles en nuestro presente y para el futuro: móviles, coches eléctricos, acumuladores…. todo lo relacionado con las baterías de litio”
(Bizkeliza).- El obispo de Bilbao, Joseba Segura, visitó RD Congo a finales del mes de junio. Durante 12 días recorrió una pequeña parte de este extenso país -el segundo mas grande de todo el continente africano- en compañía del misionero Iñigo Iriarte. Estuvieron en muchos de los lugares en los que misioneros de las Diócesis Vascas han colaborado a lo largo de varias décadas y donde han puesto en marcha numerosos proyectos que han ayudado en el desarrollo de una tierra rica en recursos naturales pero que, desgraciadamente, está siendo expoliada por intereses internacionales.
Entre otros lugares, el obispo de Bilbao estuvo en sur del país, al oeste de Likasi, “la ciudad a la que nuestro misionero Xabier Goikuria ha entregado su vida”, Ahí está Kolwezi, hoy la mayor zona productora de cobalto en el mundo. “Aquí -explica Segura– se está viviendo un drama que tiene mucho que ver con algunos objetos que consideramos imprescindibles en nuestro presente y para el futuro: móviles, coches eléctricos, acumuladores…. todo lo relacionado con las baterías de litio”.
Junto a estas líneas reproducimos un reportaje cuyo tema central es la explotación del trabajo infantil que se está produciendo allí. “No son algunos niños. Son decenas de miles”, señala el obispo en la presentación. Este video es la edición de un reportaje publicado en DN (https://www.democracynow.org) el 13 de julio de 2023. “Lo he grabado -dice Segura– con subtítulos que traducen automáticamente el original inglés. La traducción no es perfecta, pero permite seguir el contenido esencial. El protagonista del reportaje es Siddharth Kara, autor de un excelente libro sobre el tema titulado ‘Cobalt Red: How the Blood of the Congo Powers Our Lives’, cuya lectura recomiendo encarecidamente. Su contenido es demoledor. Este video es un pequeño resumen de lo que esa obra de investigación ilustra con detalle”.
Mujeres africanas
En una reciente entrevista, al regresar de RD Congo, Segura explicaba que se ha encontrado con que muchas de las obras que se iniciaron por la iniciativa de los misioneros vascos, siguen en marcha “y ya en manos de africanos, más bien africanas -matiza-, o sea, congregaciones religiosas africanas, que se pusieron en marcha en África y que todas sus vocaciones son africanas”.
Destaca que sobre todo las mujeres tienen una gran capacidad para gestionar -un hospital, una escuela, un centro de discapacitados, una casa de niños huérfanos…-, “o gestionar tantas cosas que el corazón de la mujer, sabe cuidar y sabe priorizar más que los intereses de varones que, a veces, se ponen delante de los intereses de las obras”.
"Una cosa que saben todos los especialistas en cooperación es que es mucho más seguro poner una obra, incluso recursos económicos en manos de las mujeres, que en manos de los hombres, en determinados países y situaciones"
Y defiende que, en general, «una cosa que saben todos los especialistas en cooperación es que es mucho más seguro poner una obra, incluso recursos económicos en manos de las mujeres, que en manos de los hombres, en determinados países y situaciones. No digo yo que eso sea una cosa general, pero hoy por hoy es así. Y es muy bueno saber -añade- que hay mujeres que tienen capacidad de gestión económica y que son mujeres africanas, que han aprendido y que están comprometidas con la obra, con ese corazón que han puesto muchos misioneros y misioneras europeos y que ahora cada vez es un corazón más de allí”.
Explotación de recursos
En la entrevista, el obispo también habla del tema de la minería “para poder vivir allí -dice- hace falta tener mucha flexibilidad y aceptar muchas situaciones que a nosotros nos parecen caóticas». Por ejemplo, como circulan por las carreteras cientos y cientos de camiones”. Se refiere básicamente a la zona sur, que es la zona minera. La región que se conocía como Katanga y que, concretamente, ahora se llama Alto Katanga, en la que existe una concentración de minerales muy valiosos, muy grande. Allí -explica- hay muchas empresas y el jefe tradicional de la zona recibe comisiones millonarias, con lo que eso supone “allí salen camiones y camiones, cientos de camiones en una fila y atraviesan la frontera en unos puntos que es un auténtico caos, por ejemplo en este momento con Zambia”. Luego van a Tanzania y llegan a los puertos del este de África y de allí se embarcan y se van para China, se van para India…, “en fin, una cosa tremenda”.