| J. B./Cope
Un día después de unas declaraciones que no fueron lo suficientemente nítidas acerca del caso del sacerdote de Málaga detenido por sedar, violar y grabar a varias mujeres, el portavoz de la Conferencia Episcopal, César García Magán acudía a La Linterna de la Iglesia para aclarar que "jamás la violencia y el abuso a la mujer están justificados. Siempre tiene que estar condenado y reprobado".
"Con toda claridad y nitidez es un hecho condenable y rechazable", añadía el obispo auxiliar de Toledo, quien añadió que "cualquier abuso a una mujer, sea en el ámbito del hogar o fuera del ámbito del hogar, sea por su marido o o por su pareja, o por otra persona es condenable".
"En este caso reviste mayor gravedad ya que hablamos de un sacerdote que debe merecer esa credibilidad", admitió, apuntando al nuevo comunicado -el tercero- del Obispado de Málaga con nuevas acciones, entre las que se encuentra solicitar personarse en la causa e iniciar el proceso de expulsión del sacerdocio del implicado, "al que nos adherimos.
"Se va a personar la Dióceis en el proceso lo cual me parece muy bien. También se va a abrir la causa para la expulsión del estado clerical. Nuestra cercanía y apoyo a las victimas. Jamas la violencia y el abuso a la mujer está justificado. Siempre tiene que estar condenado y reprobado”, concluyó el secretario general de la CEE.
Etiquetas