El cardenal Ricardo Blázquez, expresidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo emérito de Valladolid, ha abandonado este Lunes Santo el Hospital Nuestra Señora de Sonsoles en Ávila, donde fue ingresado el pasado 23 de marzo al agravarse una dolencia crónica.
Blázquez, que el próximo Lunes de Pascua (10 de abril), cumplirá 81 años, ha regresado a la residencia sacerdotal diocesana de Ávila, donde reside desde su despedida como arzobispo de Valladolid, en julio de 2022.
Blázquez presidió la Conferencia Episcopal durante dos etapas (2008-2011 y 2014-2020) y ha sido estrecho colaborador de los papas Benedicto XVI y Francisco, quienes le encomendaron delicadas misiones durante la presencia del cardenal en algunas de las congregaciones vaticanas de las que formó parte.
Como arzobispo de Valladolid, celebró su última misa el 23 de julio del año pasado, días antes de ceder la silla al actual prelado, Luis Argüello, mano derecha de Blázquez tanto en la Conferencia Episcopal durante su segundo mandato, como en la archidiócesis durante los seis años en que fue su obispo auxiliar. Precisamente esta archidiócesis se ha mostrado su alegría por la mejoría "de su querido don Ricardo".
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