El portavoz de la CEE pide a la Fiscalía que le envíe el informe, aunque niega “opacidad” en el tratamiento de los abusos Los obispos lamentan que el Gobierno utilice la pederastia como “arma arrojadiza” contra la Iglesia

Los obispos “estamos dispuestos a abordar la cuestión. Creemos que poder sentarnos, dialogar, escuchar y recibir sugerencias que nos puedan hacer es bueno. El deseo es contribuir al bien común a favor de las víctimas y para que no haya otras víctimas”. El secretario general de la CEE, Luis Argüello, salió al paso del informe de la Fiscalía General del Estado sobre la actuación de la Iglesia en materia de abusos, y negó la “opacidad” que lamenta el organismo.

En declaraciones al término de la Comisión Permanente, Argüello mostró su “deseo” de diálogo, y anunció que el borrador sobre la nueva normativa para la prevención y protección de abusos a menores en la Iglesia “está muy avanzado”. El texto está a la espera de que Roma dé el plácet, y en el mismo se incluye la posibilidad de que la Iglesia se presente como acusación particular en los casos de abusos sexuales en los que estén involucrados sus miembros, y también se insta a animar a las víctimas a denunciar ante la justicia civil.

Archivos inviolables

Eso sí, el portavoz pidió que fuera la fiscalía quien se pusiera en contacto con los obispos para iniciar ese diálogo, a partir de “nuestro futuro decreto, para acoger sus aportaciones”. Nada dijo de la inviolabilidad de los archivos eclesiásticos, blindados por los Acuerdos Iglesia-Estado de 1979.

“Conocemos el informe de la Fiscalía a través de los medios. Desearíamos tener el documento completo para poder juzgarlo”, reclamó el portavoz, quien insistió en que “nuestra convicción es que los clérigos condenados son muy poquitos”.

Sobre los #abusos@MonsArguello “El protagonismo tiene que ser de las víctimas. Hemos dicho que estos comportamientos son inaceptables”

— Of. Información CEE (@prensaCEE) 27 de junio de 2019

Sólo se habla de la Iglesia

Al tiempo, quiso dejar claro su oposición a que sólo se investiguen los abusos en el seno de la Iglesia. “No nos pareció bien que solo se aborden los abusos en la Iglesia. No entendimos que la ministra solo preguntara sobre la Iglesia, y no a la sociedad en su conjunto”, aclaró, lamentando las “armas arrojadizas” que a menudo se da, en su opinión, contra la institución.

Por otro lado, y aunque no se ha nombrado al sucesor de monseñor Menéndez al frente de la Comisión Antipederastia (Argüello la coordinará entretanto), sí ha anunciado que ésta ampliará su equipo a “profesionales que vayan más allá de jurídico-canónico”. ¿Habrá víctimas?, se le preguntó. “No lo afirmo ni lo niego”, atajó.

“Nos preocupa lo referido al pasado para poder atender a las víctimas y prevenir el futuro. Ya no aceptamos los comportamientos que pasan por mirar para otro lado o considerar que los trapos sucios se lavan en casa”, recalcó, aunque siguió admitiendo que la CEE “no tiene potestad sobre las diócesis” para obligarles a entregar la documentación.