El obispo de Salamanca, Carlos López, fue ingresado anoche en el Hospital Clínico Universitario de Salamanca al presentar un problema respiratorio. El primer resultado del test del virus Covid-19 ha dado negativo, aunque se le repetirá en las próximas horas al no resultar concluyente.
En una nota, la diócesis pide orar por su pastor, y se une a la súplica por todos los enfermos afectados por este virus, sus familias y las de los fallecidos. Del mismo modo, lo piden también por todos los sanitarios y las personas que en estos días están colaborando con su esfuerzo y trabajo por el bienestar de todos.
Aunque no se ha confirmado su positivo, el de Carlos López es el tercero entre los obispos de Castilla y León con similares dolencias. Así, desde hace días están ingresados el obispo de Ávila, José María Gil Tamayo; y el de Palencia, Manuel Herrero.
Estado de los obispos
Gil Tamayo continúa en el hospital, y se encuentra "tranquilo, cansado... Pero animado", según explicaron a RD fuentes cercanas al prelado. Herrero, por su parte, sigue "animado" pero con pronóstico reservado.
Mientras tanto, la diócesis de Getafe ha vuelto a sentirse sacudida por la muerte. A la de Manolo García Barrio, cura de Móstoles, se suma la figura de Félix Lorrio Mangas, quien fuera párroco de El Salvador en Leganés. Tenía 83 años. Estaba sin cargo pastoral y viviendo en su residencia propia. Nacido en 1936, ordenado en 1961, incardinado en Getafe desde la creación de la diócesis en 1991. Descanse en paz.