Cada martes de Cuaresma se publica el testimonio de uno de ellos, entre los que se encuentran un chico y una chica de la archidiócesis de Madrid. Este 28 de febrero el elegido ha sido Pablo Ureña, de 21 años, quien asegura que el tiempo de Cuaresma es «muy importante» para buscar a Dios en el interior de cada uno.
Asimismo, recuerda las pautas de las que habla el Papa Francisco para escuchar al Señor en estos cuarenta días: a través de la Palabra y a través del prójimo. «No solo aquel que nos acompaña en Misa, a las oraciones, convivencias, que eso está muy bien», sino también a esas personas «que están sedientas o que necesitan tanto de la vida y de Dios».
Para esto, el joven de Madrid explica lo que hace él en este tiempo: además de los sacramentos y la oración, invita a hacer algún voluntariado de los que proponga la diócesis o las ONG, pertenezcan o no a la Iglesia, porque en el servicio a los demás «está Dios». Es buen momento «para ofrecer todo ese sacrificio» y acercarse más al Evangelio, afirma.
«Te propongo —concluye el joven— no solo escuchar el Evangelio, sino tú también ser Evangelio y ser buena noticia para los demás».