"El camino de conversión es ante todo una apertura a la vida verdadera" Conversión y camino de la fe como camino de gracia y vida en Dios

Cristo, luz del mundo
Cristo, luz del mundo

"El camino de conversión es ante todo una apertura a la vida verdadera que se alcanza en un proceso de madurez, de ir tomando conciencia"

"Abrirnos en la fe en camino de conversión es abrirnos a la posibilidad de corrección, donde se requiere de compasión y misericordia siempre paciente"

"Con el objetivo que al escuchar el susurro del Espíritu Santo podamos caminar en la voluntad de Dios, la cual dará a nuestra alma la garantía de paz"

El evangelio, como buena noticia comunicada por Jesús, es camino de vida.

La conversión es un proceso en libertad con conciencia por la vida verdadera.

En esta conciencia de vida verdadera se puede ver con transparencia lo que oscurece la vida en nuestro caminar.

Por eso, tanto el profeta Isaías como el Evangelista Mateo nos recuerdan, en este domingo tercero del tiempo ordinario, que el pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz .

Cristo es esa luz referida, también, por el Evangelista Juan y que afirmará él mismo en sus seguidores: ustedes son la luz del mundo.

Tomar conciencia de la verdad, del bien, del amor y de la vida, requiere una gran apertura de compasión y misericordia para abrirnos en esperanza a esa gran luz.

Cristo, luz

Hay quienes se creen en todo justificados porque en su legalidad creen cumplir con deberes y obligaciones, pero carecen de la belleza del amor que sabe ser misericordioso y compasivo, que abriéndose a la verdad, al bien y a la vida , comprende en libertad, los procesos de las personas y de las comunidades o grupos humanos.

El camino de conversión es ante todo una apertura a la vida verdadera que se alcanza en un proceso de madurez, de ir tomando conciencia , de ir fortaleciendo la voluntad en el amor y el bien por la vida que se va poseyendo a mayor plenitud en la medida de la madurez.

Hay quienes se deciden y definen por una vida en lo temporal, negándose al camino de la vida por la fe. Nuestra libertad nos da esa opción, sin embargo en esta opción se puede transitar en un vacío interior donde no se alimenta la naturaleza propia del espíritu que mora en cada persona.

Ese vacío interior por decidir no alimentar el espíritu desde la fe y más en la ausencia de optar lo bueno, el espíritu transita en desiertos, careciendo de vida que nos puede proporcionar felicidad y gozo.

Abrirnos en la fe en camino de conversión es abrirnos a la posibilidad de corrección, donde se requiere de compasión y misericordia siempre paciente, porque hay que perdonar y ser perdonado hasta 70 veces siete. 

Luz
Luz

Nunca debemos perder la paciencia en este camino de conversión, nunca debemos perder la esperanza de un amor que sabe ver los esfuerzos y las luchas que cada persona asume en el proceso de la conversión.

En este sentido, escuchamos al apóstol San Pablo en la segunda lectura de la carta a los corintios donde bien exhorta , con firmeza , a no caer en las divisiones, porque el espíritu que hemos recibido en nuestro bautismo nos conduce a la unidad y no a la división . El espíritu de Dios es siempre un espíritu que nos lleva a la unidad en la Comunion.

Es, ciertamente, un camino que no es fácil, pero por eso tenemos que esforzarnos y ayudarnos . Lo primero siempre es escuchar la voz del Espíritu Santo desde la oración, la meditación de la palabra de Dios y en los signos que nos manifiesta hablándonos en la cotidianidad de nuestra vida ordinaria, en lo que vivimos y nos movemos. Lo anterior con el objetivo que al escuchar el susurro del Espíritu Santo podamos caminar en la voluntad de Dios, la cual dará a nuestra alma la garantía de paz, aún en momentos de confusión y de prueba y saldremos airosos en la perseverancia .

Los primeros discípulos de Jesús: Pedro, Juan, Andrés y Santiago deberán iniciar este aprendizaje y estar muy atentos para absorber en tres años de formación y camino con Jesús lo que les preparará para muchos años para expandir la obra de Jesús con la ayuda siempre del Espíritu Santo.

Crsito, luz

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