(Editorial Paulinas).- La vida que aún palpita con vigor en la Vida Consagrada está muchas veces oculta, por eso es necesario sacarla a la luz para revitalizarla.
La autora es una mujer consagrada, teóloga y biblista, que quiere poner sobre el tapete los desafíos, las sugerencias y la autocrítica necesaria para que se den las respuestas viables para su renovación. Porque las que se han dado hasta ahora no aportan ninguna solución factible a los retos que tiene planteada la Vida Consagrada en nuestros días. Por eso es necesario cuestionarse a fondo y sin miedo, para responder con nuevas aportaciones que promuevan una transformación inaplazable, que aporte esperanza para el sendero que se tiene que recorrer y así tenga futuro.
Para ello ofrece claves esenciales para su revitalización, desde la realidad social y eclesial que se vive en este momento concreto de nuestra historia, a la luz de distintos pasajes de la Escritura y regresando con ilusión cada día al momento de la primera llamada.
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