Del 29 al 31 de agosto en el CELAM Encuentro de Participantes de América Latina en la Asamblea del Sínodo: "Buscamos una mirada común"
Del 29 al 31 de agosto la sede del Celam acoge a los participantes en la primera sesión de la Asamblea General del Sínodo en representación de América Latina y el Caribe.
El P. Pedro Brassesco secretario general adjunto del Celam, profundiza en la importancia del Encuentro y los detalles desde lo metodológico, frente al que constata que los resultados le permiten ver que el Espíritu Santo nos va conduciendo
Espacios destinados a la oración, la presentación de un subsidio para el discernimiento y la profundización en la conversación espiritual, hacen parte de la agenda del Encuentro de participantes de América Latina y el Caribe a la Asamblea del Sínodo
Espacios destinados a la oración, la presentación de un subsidio para el discernimiento y la profundización en la conversación espiritual, hacen parte de la agenda del Encuentro de participantes de América Latina y el Caribe a la Asamblea del Sínodo
Conocerse y buscar una mirada común sobre los principales temas que plantea el Instrumentum Laboris a la luz de la experiencia en América Latina y el Caribe durante el camino sinodal, es el objetivo del encuentro que del 29 al 31 de agosto reunirá en la sede del Celam en Bogotá a quienes participarán en la primera sesión de la Asamblea General del Sínodo de la Sinodalidad en octubre próximo.
Así define este momento el P. Pedro Brassesco secretario general adjunto del Celam, al comentar que los cerca de 74 participantes vienen de diferentes países, algunos de ellos participaron en las asambleas regionales y otros fueron nominados por las 22 Conferencias Episcopales del continente, por lo que conocerse será el primer paso para vivir la experiencia de la sinodalidad y recoger lo que se ha dicho en las síntesis hechas durante los Encuentros Regionales, para que los asistentes al Sínodo en octubre, puedan llevar la voz de América Latina y el Caribe a la primera sesión de la Asamblea General del Sínodo que se efectuará en Roma.
Escuchar para discernir
Refiriéndose a la agenda del Encuentro el sacerdote argentino precisó que seguirá la misma metodología propuesta para el Sínodo que unirá a la Iglesia universal. Esto quiere decir que partirá de la experiencia de la conversación espiritual vivida durante las Asambleas Regionales, pero con un esquema de puesta en común diferente. Así, cada uno de los grupos formados por los participantes en el encuentro, tomarán como punto de referencia los grandes temas que plantea el Instrumentum laboris: comunión, misión y participación. Trabajo que se realizará como parte de la conversación en el espíritu.
Posteriormente, las conclusiones que surjan de estos encuentros se pondrán en común, durante una sesión plenaria donde los demás participantes podrán hacer sus aportes para regresar a los grupos y seguir profundizando en la reflexión a partir de los aportes de la plenaria. En esta línea, los temas se abordarán en dos bloques de trabajo que implican la sesión general y el trabajo por grupos.
Para el P. Pedro Brassesco es importante aclarar “el Encuentro no tiene la pretensión de hacer un documento con la postura de Latinoamérica. La idea no es que América Latina vaya a la Asamblea del Sínodo con una agenda propia. Se trata de hallar una mirada común que surge de todo el proceso realizado en el continente,” afirma.
Los diálogos estarán centrados en los principales temas desde la experiencia y la realidad latinoamericana y aquello que consideren es necesario profundizar o proponer para una construir una iglesia más sinodal.
La metodología
La implementación de la metodología contará con el acompañamiento del P. Giacomo Costa coordinador de la Comisión preparatoria de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de la Sinodalidad. También se harán presentes los teólogos Carlos Galli coordinador del equipo de reflexión teológica, el brasileño Agenor Brighenti y el laico Rafael Luciani, que además integran la Comisión Teológica del Sínodo. No obstante, el secretario general adjunto del Celam aclara que “No queremos que esto sea un mini sínodo, ni un Pre- sínodo, pero si un encuentro que nos vaya introduciendo a todos en la lógica y la dinámica que se vivirá en la Asamblea del Sínodo”.
A diferencia de los encuentros regionales el P. Brassesco explica que los facilitadores del encuentro no serán miembros de la Compañía de Jesús. En esta oportunidad asumirán este rol quienes fueron convocados por la Secretaría del Sínodo para desempeñar esta misma función en la Asamblea de Roma. “Esto también implica para ellos vivir la experiencia, para algunos será novedosa y para otros una nueva oportunidad tras la vivida durante los Encuentros Regionales donde ya fueron facilitadores”.
Para cumplir con los objetivos del Encuentro, los asistentes contarán con un subsidio de discernimiento, un material elaborado por los teólogos, cuyo contenido indica el P. Brassesco “reúne lo fundamental del Instrumentum Laboris, la síntesis de América Latina y los frutos que ya se perciben de este trabajo, de manera que los sinodales puedan tener un trasfondo como eco para que resuenen también las palabras de aquellos que participaron durante las fases diocesana y continental”.
En retrospectiva
El P. Pedro Brassesco ha liderado e impulsado desde el Celam el camino sinodal vivido en todo el continente, por lo que al referirse a las expectativas de este Encuentro previo a la primera sesión de la Asamblea del Sínodo asegura que después de tantos meses trabajando va viendo los resultados del proceso, lo que se puede apreciar en los diferentes estilos de discernimiento, las formas de trabajo en conjunto, las maneras de participación, lo que realmente es muy significativo y prometedor frente a lo que puede ser esta primera parte fase o sesión y lo que vendrá después.
“Uno es consciente de la riqueza, lo especifico que se ha logrado en este camino sinodal, lo que se vivió en las comunidades que participaron durante los Encuentros Regionales, constatando el deseo de participar y el gran interés que ha suscitado este tiempo en la gente. Es ver, como el Espíritu nos va conduciendo”.