¿Volver a lo mismo? Tiempos nuevos, soluciones nuevas
Es tiempo de orar al Espíritu, como hicieron apóstoles, para que nos ilumine en la toma de decisiones que serán sin duda fuente de vida nueva, o mejor, una nueva expresión de la Vida que nos regala el Resucitado.
| Gemma Morató / Hna. Carmen Solé
Cada tiempo, o si preferimos cada circunstancia, nos ha traído unas problemáticas nuevas, a las que la Iglesia también ha buscado medios para ofrecer soluciones adecuadas a la nueva realidad.
En la Eucaristía de esta última semana, hemos leído fragmentos del libro de los Hechos de los apóstoles, y en concreto, el capítulo 1, donde se nos narra cual fue la actuación de la Iglesia ante la problemática nueva que presentaba la conversión de los no judíos al cristianismo ¿debían asumir las practicas del judaísmo o no?
Los apóstoles, reunidos en Jerusalén envían una carta a los nuevos cristianos con la breve explicación de “no imponeros más cargas que las indispensables: no comer carne de los animales ofrecidos en sacrificio a los ídolos, que no comáis sangre ni tampoco carne de los animales ahogados y que evitéis la inmoralidad sexual. Si os guardáis de estas cosas, actuareis correctamente.”
Es tiempo de orar al Espíritu, como hicieron apóstoles, para que nos ilumine en la toma de decisiones que serán sin duda fuente de vida nueva, o mejor, una nueva expresión de la Vida que nos regala el Resucitado.
Porque la pandemia que sufrimos nos ha presentado a casi todos los niveles unos desafíos nuevos, generadores de interrogantes que por ahora no podemos ni responder. ¿Debemos seguir haciendo lo que hacíamos?, aunque el mundo, y también cada uno, hayamos cambiado, ¿no se nos presentan interrogantes nuevos? Es tiempo de simplificar todo, porque una sola cosa es importante.
La tentación de volver a lo mismo, de repetir todo cuanto ya conocemos es constante en la historia del mundo y de cada persona, y esta actitud no es mala si nos permite acercarnos más a los que sufren y lloran ante la realidad del momento y nos empuja hacia nuevos horizontes.