Confiar... Volver a empezar
Por eso es tiempo de tanteos, de ilusiones, fracasos, problemas, soluciones, imaginación y dudas. Volvemos a empezar, pero no conseguimos saber exactamente qué empezamos, incluso aquellos que desean con mayor energía volver a los tiempos anteriores a la pandemia tampoco saben cómo debe ser el hoy.
| Gemma Morató / Hna. Carmen Solé
Para los estudiantes, para la gente joven y los niños, estamos en la época de final de curso, un curso bien distinto de cuanto hubiésemos imaginado. Dicen que ahora es tiempo de volver a empezar, pero muchos quizás nos preguntamos ¿qué volvemos a empezar? No es retomar lo que ya pasó, se ha construir un mundo nuevo donde el respeto por la creación sea mayor y sea como el motor que nos empuje.
Por eso es tiempo de tanteos, de ilusiones, fracasos, problemas, soluciones, imaginación y dudas. Volvemos a empezar, pero no conseguimos saber exactamente qué empezamos, incluso aquellos que desean con mayor energía volver a los tiempos anteriores a la pandemia tampoco saben cómo debe ser el hoy.
Y si no sabemos qué empezamos aun es más difícil saber cómo empezamos. Unos activos y decididos han retomado su vida como antes prescindiendo de cuanto se ha vivido, de las heridas generadas, de los gozos encontrados.
Otros consideran que es mejor ver todo un poco desde fuera con una mirada más indecisa que segura, intentando reconstruir sin saber analizar dónde hallaremos el empuje necesario, porque en muchos aspectos nuestro mundo no tiene presente a Dios.
Y sin embargo solo Dios conoce cuanto espera a esta humanidad ahora globalmente afectada. Solo poniendo nuestra confianza y esperanza en Él podremos reconocer cual es el camino que nos muestra. Él que en el evangelio nos dice en ocasiones diversas “no temáis” nos conducirá hacia el bien que deseamos, hacia la luz que buscamos porque en Él hallamos la fuerza para el camino que queda aun por recorrer hasta que volvamos a empezar.