"La justicia de género en la Iglesia es la cuestión decisiva para el futuro" Bätzing, presidente de la Conferencia Episcopal Alemana: "Sin las mujeres, la Iglesia pronto se acabará"
"La justicia de género en la Iglesia es la cuestión decisiva para el futuro", ha afirmado el obispo de Limburgo, reconociendo que la mayoría de la jerarquía católica no piensa igual: "aparte de las demandas a los líderes de la Iglesia en Roma, que estoy dispuesto a presentar, no se puede hacer nada"
Ha mencionado dirigir una "petición a Roma de que la cuestión hasta ahora abierta de la ordenación de las diaconisas se continúe debatiendo y se responda positivamente"
"La justicia de género en la Iglesia es la cuestión decisiva para el futuro", ha declarado el presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, Georg Bätzing, que está en el cargo desde marzo.
Defendiendo con la misma contundencia que en otras ocasiones la igualdad dentro de la Iglesia, como en la sociedad, ha afirmado que "sin las mujeres, la Iglesia pronto se acabará".
Sobre su acceso a ministerios ordenados, katolisch.de ha publicado que el obispo de Limburgo ha precisado: "los buenos argumentos teológicos están en contra" de negar a las mujeres ese derecho. Pero ha lamentado que "aparte de las demandas a los líderes de la Iglesia en Roma, que estoy dispuesto a presentar, no se puede hacer nada".
De la renovación sinodal a la igualdad real
El presidente del episcopado alemán apuesta claramente por la sinodalidad en la Iglesia, que debe poner en común sus estrategias de renovación y avanzar hacia la igualdad entre hombres y mujeres. Mencionando una "petición a Roma de que la cuestión hasta ahora abierta de la ordenación de las diaconisas se continúe debatiendo y se responda positivamente".
Si los cristianos no están preparados para dejar los espacios interiores y convertirse en parte de una Iglesia en salida, "entonces la Iglesia se confirmará como aburrida y rancia"
El domingo de Pentecostés Bätzing, por otra parte, ha alertado de las amenazas que rodean a la Iglesia en el contexto de la crisis del coronavirus: "Los servicios de la Iglesia podrían quedar aún más vacíos" tras la pandemia.
Con los templos cerrados y sin responder demasiado a los "signos de los tiempos", la institución eclesial, en palabras del obispo, se ha visto limitada a las atenciones sacramentales a pesar de su "asombrosa amplitud" de ofertas en los medios de comunicación. Si los cristianos no están preparados para dejar los espacios interiores y convertirse en parte de una Iglesia en salida, "entonces la Iglesia se confirmará como aburrida y rancia", ha sentenciado Bätzing.