"Se unen a la población afectada por el terremoto, renovando sus oraciones y anunciando desde ahora todo el apoyo posible para hacer frente a la emergencia" "Es una herida profunda": La Iglesia europea llora por "la destrucción y el sufrimiento" provocado por el terremoto en Siria y Turquía
"Nos fijamos en Alepo, una ciudad que fue martirizada en la guerra de Siria y que ahora vive este nuevo martirio"
"El enorme número de víctimas mortales, que va en aumento, la destrucción y el sufrimiento de tantas personas nos han afectado y conmovido profundamente"
"Nuestros pensamientos y gratitud van a quienes, en este momento, están llevando socorro, en condiciones muy difíciles, con temperaturas invernales"
"Nuestras Cáritas están ocupadas haciendo frente a la emergencia, atendiendo a los heridos, consolando a los que han perdido a algún familiar y buscando refugio para los que ya no lo tienen. Las iglesias locales ya están aportando todo tipo de ayuda y hospitalidad, y son un brillante ejemplo al que admiramos"
"Nuestros pensamientos y gratitud van a quienes, en este momento, están llevando socorro, en condiciones muy difíciles, con temperaturas invernales"
"Nuestras Cáritas están ocupadas haciendo frente a la emergencia, atendiendo a los heridos, consolando a los que han perdido a algún familiar y buscando refugio para los que ya no lo tienen. Las iglesias locales ya están aportando todo tipo de ayuda y hospitalidad, y son un brillante ejemplo al que admiramos"
"Es una herida profunda". Los obispos europeos, reunidos en Praga en la asamblea continental del Sínodo, han vivido con dolor, y reaccionando poniendo a todas las Cáritas e instituciones eclesiales en movimiento, al brutal terremoto en Turquía y Siria, que se ha cobrado miles de vidas y ha causado un mar de destrucción y desesperación en unas poblaciones ya de por sí martirizadas.
Desde Praga, en un comunicado conjunto, las Iglesias de Europa "expresan su cercanía a las poblaciones del sur de Turquía y del norte de Siria, gravemente afectadas por el terremoto de la noche del 6 de febrero".
"El enorme número de víctimas mortales, que va en aumento, la destrucción y el sufrimiento de tantas personas nos han afectado y conmovido profundamente", asumen los obispos del Viejo Continente. "Es una herida profunda, que en Siria se suma a la de la guerra que asola el país desde hace ya 12 años", añaden.
En su comunicado las Iglesias europeas se muestran "cerca de la comunidad del Vicariato de Iskenderun, que ha visto destruida su catedral, afortunadamente sin pagar un precio en vidas humanas". Al mismo tiempo, añade, "nuestros pensamientos se dirigen al Vicariato de Anatolia, que atraviesa una difícil situación de destrucción. Nos fijamos en Alepo, una ciudad que fue martirizada en la guerra de Siria y que ahora vive este nuevo martirio".
Cáritas, haciendo frente a la tragedia
Pero, por encima de todo, sostienen en la nota, "nuestros pensamientos y gratitud van a quienes, en este momento, están llevando socorro, en condiciones muy difíciles, con temperaturas invernales". "Nuestras Cáritas están ocupadas haciendo frente a la emergencia, atendiendo a los heridos, consolando a los que han perdido a algún familiar y buscando refugio para los que ya no lo tienen. Las iglesias locales ya están aportando todo tipo de ayuda y hospitalidad, y son un brillante ejemplo al que admiramos", concluyen.
"Con emoción, las Iglesias de Europa se unen a la población afectada por el terremoto, renovando sus oraciones y anunciando desde ahora todo el apoyo posible para hacer frente a la emergencia", finaliza el comunicado.
