Llaman a la unidad frente a la pandemia del coronavirus Obispos de la COMECE y la CEC: "Es el momento de mostrar nuestro compromiso con los valores europeos"
El documento publicado describe que la crisis actual "ha expuesto las vulnerabilidades" de la sociedad occidental y sus sistemas políticos
Firmado por el cardenal Hollerich, arzobispo de Luxemburgo y presidente de la COMECE, junto al presidente de la CEC, Christian Krieger, este mensaje de las iglesias europeas se dirige a las instituciones comunitarias pidiendo solidaridad "en lugar de capitular ante el miedo y los nacionalismos"
Los obispos de la COMECE y la CEC han mandado un mensaje de unidad en el contexto de la pandemia del coronavirus. El documento publicado describe que la "crisis actual", que está "poniendo a prueba a cada persona, familia y comunidad", también "ha expuesto las vulnerabilidades" de la sociedad occidental y sus sistemas políticos.
"Es el momento de mostrar nuestro compromiso con los valores europeos", han declarado, en alusión a la defensa de la democracia y la solidaridad entre naciones.
Alabando los esfuerzos de los profesionales de emergencia, sanitarios y de servicios básicos frente a la epidemia, han afirmado orar por quienes cuidan de la población, sirviendo "a sus semejantes con empatía y calidez".
Firmado por el cardenal Hollerich, arzobispo de Luxemburgo y presidente de la COMECE, junto al presidente de la CEC, Christian Krieger, este mensaje de las iglesias europeas expone su especial preocupación por "los enfermos, los ancianos, los pobres" y quienes han perdido familiares a causa de la triste emergencia sanitaria.
Dirigiéndose a las instituciones comunitarias, exigen a Europa que demuestre sus valores democráticos de cooperación internacional "en lugar de capitular ante el miedo y los nacionalismos". Reclamando iniciativas firmes de ayuda humanitaria, proponen medidas como "repartir la carga de la atención a los enfermos" o "facilitar el intercambio de material médico".
"Encomiamos con gratitud las numerosas acciones políticas de apoyo mutuo y alentamos a los responsables políticos de la Unión Europea y sus estados miembros a que continúen actuando de manera decidida", han declarado.
Declaración conjunta completa de los Presidentes de la COMECE y la CEC en el contexto de la pandemia de COVID-19
Este es el momento de mostrar nuestro compromiso con los valores europeos. La pandemia COVID-19 y sus graves consecuencias han golpeado a Europa y al mundo entero con toda su fuerza. Poniendo a prueba a cada persona, familia y comunidad, la crisis actual ha expuesto las vulnerabilidades y aparentes certezas de nuestra política y economía y de nuestras sociedades.
Sin embargo, estos tiempos difíciles también nos están permitiendo redescubrir nuestra humanidad común como hermanos y hermanas. Pensamos en las muchas personas que están sembrando la esperanza cada día ejerciendo la caridad y la solidaridad.
Queremos orar con profunda gratitud por todos aquellos que sirven a sus semejantes con empatía y calidez, apoyándolos desinteresadamente: médicos, personal de enfermería, proveedores de servicios básicos, fuerzas de la ley y el orden, y personas involucradas en la atención pastoral. Deseamos rezar por todas las personas que están sufriendo durante esta crisis, en particular los enfermos, los ancianos, los pobres, los excluidos y los niños que experimentan inestabilidad familiar. También recordamos en nuestras oraciones a todos los que fallecieron.
Además, acogemos con gratitud las numerosas iniciativas individuales y colectivas que están reinventando nuevas formas de solidaridad y nuevas formas de compartir más allá del necesario distanciamiento social.
Encomiamos con gratitud las numerosas acciones políticas de apoyo mutuo y alentamos a los responsables políticos de la Unión Europea y sus estados miembros a que continúen actuando de manera decidida, transparente, empática y democrática. Pedimos sabiduría y fuerza a los dirigentes tanto a nivel nacional como europeo.
Es el momento de que todos nosotros demostremos nuestro compromiso conjunto con el proyecto europeo y con los valores europeos comunes de solidaridad y unidad, en lugar de capitular ante el miedo y los nacionalismos.
Expresiones concretas de nuestra responsabilidad europea compartida podrían ser, por ejemplo: repartir la carga de la atención a los enfermos, facilitar el intercambio de material médico, adoptar medidas creativas que alivien el impacto social, económico y financiero, así como reforzar la cooperación internacional y la asistencia humanitaria para apoyar los sistemas de salud más débiles en las regiones necesitadas del mundo.
El camino de la Cuaresma hacia la Pascua es parte esencial de la fe cristiana. Consideremos este tiempo de prueba también como un tiempo de gracia y esperanza. Permanezcamos unidos y hagamos sentir nuestra cercanía a todos, especialmente a los necesitados.
