Pero su gesto de hospitalidad no le siente bien a la extrema derecha La archidiócesis de Bolonia ofrecerá 'tortellini' sin cerdo para acoger a los musulmanes en una fiesta patronal
El político ultra Matteo Salvini arremete contra la propuesta de cambiar por pollo la tradicional carne porcina: "Están tratando de borrar nuestra historia, nuestra cultura"
La curia se reafirma frente a las críticas: "Es sorprendente que se usen fake news para confundir, y, más aún, cómo una norma de bienvenida y respeto hacia los invitados se interpreta como una ofensa a la tradición"
| Agencias
Los 'tortellini', un plato típico de Bolonia, son una forma de pasta en forma de anillo rellena de una mezcla de, habitualmente, carne de cerdo (lomo, jamón y mortadela), queso, huevo y especias. Por ello, el cambio no ha sentado bien a los defensores de la gastronomía más ortodoxa, como el chef Silvano Librenti, que afirma que, sin cerdo, el plato resultante "es otra cosa". No obstante, Zuppi también cuenta con apoyos dentro del mundo gastronómico, como el chef Mario Ferrara, quien afirma que "la comida es un lenguaje universal; alrededor de un plato de tortellini se ponen todos de acuerdo".
Otro sector que no ha visto con buenos ojos los "tortellini de bienvenida", como se han bautizado, ha sido la pujante extrema derecha italiana. Sin ir más lejos, Matteo Salvini no ha tardado en condenarlos: "Están tratando de borrar nuestra historia, nuestra cultura", afirmó en un mitin en Attigliano, en el área de Ternese, y añadió: "decir tortellini sin cerdo es como decir vino tinto sin uva".
Al respecto, la archidiócesis de Bolonia ha aclarado que la idea de los tortellini de pollo no es de Zuppi, que no se había enterado "hasta esta mañana", según informa en un comunicado, en el que aclaran que esta receta no sustituye a la de cerdo: "el Comité ha previsto que, junto a los tortellini que se adaptan a la receta asentada, se prepararán unos pocos kilogramos sin cerdo para aquellos que no pueden comerlos por diferentes razones".
Más allá de ello, se defienden de las "tortellini fake news", como se califica el uso político de la controversia: "Es sorprendente que se usen fake news para confundir a los boloñeses e italianos, y, más aún, cómo una norma de bienvenida y respeto hacia los invitados se interpreta como una ofensa a la tradición. De hecho, la preocupación era que todos pudieran participar de las fiestas, incluso aquellos que tienen problemas u otros hábitos alimenticios por razones religiosas. Algunas controversias no son aceptables ni siquiera durante la campaña electoral".