(Vatican News).- La oración a María mueve montañas; las "causas imposibles" se encomiendan siempre a la Madre de Dios a través del Rosario rezado en comunidad.
Rezar cada día el Rosario por la paz en el mundo
Tal como informa la Agencia Fides, con esta fe cierta, los católicos de la archidiócesis de Seúl, durante octubre, mes mariano, están dedicando un tiempo diario a rezar intensamente por la paz en Ucrania y en la península de Corea, pidiendo en particular la intercesión de Nuestra Señora de Fátima que – como recuerda una nota de la archidiócesis de Seúl – "deseaba que todos los fieles rezaran el Rosario cada día por la paz en el mundo".
Tiempo especial de oración
En este tiempo especial de oración, la archidiócesis celebró, el pasado 13 de octubre, una Santa Misa en honor de Nuestra Señora de Fátima en el Santuario de Seosomun, ante la presencia de unos 800 fieles, con motivo del 105º aniversario de la primera aparición de Nuestra Señora en Fátima.
Antes de la Eucaristía, los fieles rezaron juntos el Rosario, encendieron velas, y pidieron el don de la paz para Ucrania, ante la estatua de Nuestra Señora.
Oración especial por la paz
Entre otros lugares plenamente implicados en la oración especial por la paz se encuentra el Santuario de los Mártires de Jeoldusan, en la zona de Seúl, donde los fieles, reunidos también por invitación de la rama local de la Fundación Pontificia "Ayuda a la Iglesia Necesitada", se reúnen para rezar por el fin de la guerra ucraniana, recordando la invitación de Nuestra Señora de Fátima a rezar diariamente el Rosario, invocando el don de la paz.
Durante la celebración de la Eucaristía, en el Santuario de Seosomun, que alberga también un conocido museo histórico, monseñor Peter Chung Soon-taick, arzobispo de Seúl y administrador apostólico de Pyongyang, dijo a los fieles:
"Al recordar lo que la Virgen pidió hace 105 años en Fátima, invitando a todos a rezar el Rosario por la paz en el mundo y el fin de la guerra, hoy estamos todos llamados a rezar por la búsqueda de la verdadera paz en la península de Corea y en Ucrania"
Del Rosario explicó que “es una oración sencilla, que da mucha fuerza y consuelo cuando la rezamos juntos". Así lo recordó el cardenal Andrew Yeom Soo-jung, arzobispo emérito de Seúl, que también participa en la iniciativa junto con los sacerdotes, religiosos y laicos de la diócesis.
“La corona mariana es nuestra arma espiritual para derrotar eficazmente al mal; nos ayudará a vivir nuestra fe y nos transfigurará para convertirnos en agentes de paz en el mundo”
En unión con el Papa Francisco
Los fieles coreanos, en Seúl y en otras diócesis coreanas, ya se unieron espiritualmente al Papa Francisco cuando, el 31 de mayo, al final del mes mariano, el Pontífice, con la intención de "ofrecer un signo de esperanza al mundo, que sufre el conflicto de Ucrania, profundamente herido por la violencia de las numerosas guerras aún activas", rezó el Rosario ante la estatua de María Regina Pacis en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma.
Los bautizados coreanos mantienen siempre viva la intención de paz y reconciliación en la península coreanaen el rezo del Rosario, ya que las tensiones políticas y militares les afectan muy de cerca. En los últimos años, durante los meses de mayo y octubre, los obispos coreanos han promovido el rezo diario del Rosario en todas las comunidades parroquiales con una oración especial por la paz en Corea.
Desde la iglesia parroquial de Sanbon, en la diócesis de Suwon, dedicada a la "Santísima Virgen María del Rosario", Verónica Yoon Seon-hee, responsable de la "Sociedad de Consagración del Rosario", observa: "Encomendamos a la Virgen María la dolorosa situación de la guerra y el sufrimiento de tantas personas. Pedimos a la Virgen de todo corazón su intercesión para que se alcance una tregua en Ucrania, como inicio de un camino de paz, y para que entre Corea del Norte y Corea del Sur se regrese a una fase de diálogo y de aceptación del otro. Estamos seguros de que la Virgen cuida de nosotros, sus hijos".
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