Fundada en la segunda mitad del siglo XVII para la evangelización de territorios de misión en Asia, la historia de la Sociedad de las Misiones Extranjeras de París (SMEP) está cuajada de hitos apostólicos, celo misionero, vidas entregadas al martirio, pero también de monstruos que, apoyándose en el ascendiente que tenían sobre las gentes, cometieron impunemente abusos sexuales entre las personas que tenía que cuidar. Así lo acaba de dar a conocer la propia institución en un informe que, sin embargo, no parece haber dejado satisfecho a nadie.

“Hay indignación [en la SMEP]. Estas son heridas a las personas. Nunca estamos orgullosos de recibir información que señale estas cuestiones", señaló Vincent Sénéchal, superior general de la institución el miércoles 10 de diciembre, tras recibir ese día las 71 páginas de la auditoría externa encargada en febrero de 2023 a la consultora independiente GPCS.

Ese informe revela 63 denuncias de violencia sexual perpetradas por 46 sacerdotes de la congregación entre 1950 y 2024, "una cifra probablemente subestimada", como recogen algunos medios franceses, de las cuales 8 están “probadas" y que destaca la necesidad de adoptar medidas concretas para prevenir la violencia sexual.

La mayoría de las víctimas, mujeres

Tal como señala, por su parte, Los Angeles Press, " el hallazgo más notable del informe, que contradice la interpretación que tiene la jerarquía católica de por qué se producen los abusos, es que la mayor parte de las víctimas denunciadas no son varones jóvenes, como solía ser el caso en las dos primeras décadas de la crisis, sino mujeres". Así, un 60 por ciento de las víctimas son mujeres, con un 37 por ciento de víctimas varones y el resto de sexo no especificado.

Tampoco se especifica, por otra parte, la identidad de los abusadores amparándose en que "evita los detalles personales específicos o las historias individuales de las víctimas para proteger su privacidad y bienestar", aunque para este medio la razón parece otra: "No es el bienestar de las víctimas lo que se logra con este enfoque de denuncia de los casos de abuso sexual. El objetivo es proteger la identidad de los depredadores sexuales", afirma.

La pedestalización

En cuanto a las causas de estos abusos -que fueron cometidos la mayoría de ellos en  Francia,Tailandia, Camboya, Filipinas, Mauricio, Singapur, Vietnam, Malasia, Madagascar, Taiwán, Corea del Sur, la India y Japón- lo engloban en "un proceso más complejo" con " un componente relevante cuando se trata del abuso sexual del clero, conocido como pedestalización o iconización.

Se trata de "un proceso que lleva a colocar a alguien o algo en un pedestal, elevándolos a un nivel idealizado, a menudo irreal, de admiración o relevancia", algo similar a lo ocurrido en el mundo hispanohablante con el caso de Marcial Maciel o en el mundo francófono, con el Abbé Pierre.

En este punto, el informe entra en detalles teológicos "para explicar cómo el abuso del concepto de in personae Christi (actuar en nombre de Cristo) amplifica aún más este poder, lo que potencialmente facilita que los abusadores manipulen y controlen a las víctimas".

Junto a este elemento, se señalan también la falta de medidas de protección adecuadas, la histórica falta de políticas, procedimientos y formación sólidas en materia de protección -"algo común también a otras órdenes, se señala-, "lo que crea un entorno en el que pueden producirse abusos que no se denuncian ni se abordan durante años".

Igualmente, el informe reconoce "la influencia de actitudes sociales más amplias hacia el abuso sexual, particularmente en el pasado", como un elemento que "solía normalizar o minimizar el abuso como tal y sus consecuencias", todo lo cual contribuyó al surgimiento de "una cultura de silencio e inacción dentro de esa orden".

Frente a todo ello, hoy la SMEP ha asegurado en un comunicado que "esperan firmemente que este trabajo, que se basa en un deseo de transparencia, de escucha y de evaluación de las prácticas de salvaguardia pasadas y actuales, permita ser reconocidas [a las víctimas] y obtener una reparación judicial y canónica cuando todavía sea posible, o acceder a la justicia restaurativa si ya es demasiado tarde".

Compensación económica

"Decididos a aprender todas las lecciones necesarias de su gestión de los casos de violencia sexual de los que han tenido conocimiento, la SMEP se compromete a implementar las recomendaciones formuladas en este informe para garantizar la seguridad y el bienestar de las personas y fortalecer su cultura de salvaguardia". Entre las sugerencias destacan la compensación económica, ya sea en forma de pagos directos, fondos fiduciarios o el reembolso de la atención médica y psicológica.

Auténtica 'potencia' misionera en su día, en la década de los sesenta del pasado siglo se encontraban con 27 casas en todo el mundo, 848 sacerdotes y 855 religiosos varones, en la actualidad cuentan con 15 casas en 14 países, con 154 sacerdotes y 170 varones no ordenados.