Los religiosos, entre ellos un abad, fueron
secuestrados mientras estaban de camino para asistir al funeral de otro abad de la parroquia de Segué. El resto de secuestrados son el alcalde de esta aldea y su adjunto.
Ningún grupo ha reivindicado hasta ahora la autoría del secuestro.
El Estado maliense, que se encuentra en un proceso transitorio tras dos golpes de Estado en menos de un año, no controla extensas zonas del país, concretamente del norte y centro, donde la administración central está prácticamente ausente mientras aumentan los atentados perpetrados por diferentes grupos yihadistas.
Tres religiosos católicos malienses y dos responsables locales de la misma nacionalidad
fueron secuestrados hoy en la región de Mopti, en el centro del país,
por un grupo de hombres armados no identificados, según informaron a Efe fuentes locales.