Solo las mascarillas de muchos de los participantes marcaban la diferencia en la XV edición del Vía Crucis del Mundo que organiza el Programa Berakah por las calles del Casco Viejo de Vitoria-Gasteiz y en el que participan 27 colectivos diversos, que representan a los llegados de países de Latinoamérica y África, y a las delegaciones, grupos y movimientos de la Diócesis de Vitoria. Este año, además, se suma la comunidad ucraniana que hizo suya la última estación y el final del Vía Crucis en el interior de la Catedral Vieja de Santa María.

Este Vía crucis ha ido tomando cuerpo y tradición entre los fieles vitorianos. En él cada estación es un grito de los pueblos de la Tierra, de los pobres, de los descartados, de los vulnerables, de los perseguidos.  Con el lema de “A tu lado”, que preside las acciones de Berakah este curso, los 27 colectivos fueron expresando su oración y pegando en la cruz la expresión que sintetizaba su mensaje. 

A la conclusión Fidel Molina, diácono permanente y delegado del obispo para el Programa Berakah, señaló cómo “muchos no entienden que estemos al lado de los pobres, de los necesitados”. También quiso dejar patente la presencia de la diversidad diocesana en este Vía Crucis, “aquí estamos todos y todas, la diversidad de la diócesis se encuentra hoy aquí, y quien no lo vea, es porque no ha venido”. 

La plaza de Santa María fue este año la principal protagonista del Vía Crucis que volvió a concluir en el interior de la Catedral de Santa María, donde las voces del Coro de San Viator vibraron tanto en el pórtico cubierto como en la nave central. Molina señaló al coro de San Viator como “imprescindible cada año en el Vía Crucis, porque sois mucho más que un coro”. 

Lista de colectivos participantes: 

Países: Perú, República Dominicana, Paraguay, Venezuela, Colombia, Ecuador, Camerún, Guinea Ecuatorial, y Ucrania

Entidades diocesanas: Delegación de Migraciones, Cofradía de la Soledad, Coro San Viator, Cofradía de la Virgen Blanca, Hospitalidad de Lourdes, Talleres de Oración y Vida del P. Larrañaga, La Cruz Enarbolada, Comunidad Laica Corazonistas, Adoración Nocturna, Cofradía del Señor de los Milagros de Perú, Coro Betong, Cofradía de la Vera Cruz, Guardia de Honor Sagrado Corazón, Cofradía de San Viator, Pastoral de la Salud, Radio María, Misiones Diocesanas, Cofradía de la Dolorosa, Manos Unidas, H.O.A.C., y Montañeros Vedruna.

Non solum sed etiam

Cada año el Vía Crucis del Mundo que se organiza desde Berakah se consolida como un acto diocesano, y no por la presencia del obispo, que por cierto fue el primer acto público al que asistió tras ser consagrado obispo y tomar posesión de la sede de Vitoria. Es un acto diocesano por la presencia de la diversidad diocesana. Esto me hace pensar que, una vez más, las cosas en este mundo se demuestran en gerundio, y no solo vale proclamarse parte de la Diócesis, sino hacerse presente, desde la idiosincrasia particular en los actos que reúnen a toda la comunidad. Y ayer fue el Vía Crucis, pero mañana será el Corpus, las Fiestas patronales o una marcha por la paz.