Un divertimento literario de Txenti García También Ella (cuarta entrega)
Una visión de Dios en femenino es una corriente que cada día va cogiendo más fuerza, pero nadie la propone como algo excluyente de la visión dominante en los últimos …dos mil años aproximadamente. Esta ficción va un poco en la línea de los rostros de “Mi Cristo roto” del P. Cúe. De lo femenino en la Iglesia como parte de un todo que sin Ella la realidad es incompleta. De un evangelio encarnado en Jesús de Nazaret, pero también en María, su madre, en María de Magdala, en las hermanas de Lázaro, … También Ella es una propuesta de reconocimiento de “ellas” como Hija muy amada del Padre
| Vicente Luis García Corres (Txenti)
CUARTA ENTREGA
Residencia sacerdotal Santo Tomás. Comedor de invitados.
Buenas noches Eva María
Buenas noches P. Umberto.
¿Cómo estás?
Bien, gracias.
No te hemos traído aquí para juzgarte. Me han pedido que averigüe quién eres.
Lo sé.
¿Quién eres Eva María?
Soy la “Nueva” oportunidad para que los hombres y mujeres se acerquen más a Dios. El bordón en el que quienes creen en la Buena Noticia pueden apoyarse para seguir caminando. No he venido a cambiar ni una tilde de lo que Dios ha dicho hasta ahora. El Reino de los Cielos no es un lugar, es un estado de gracia sobre el conocimiento de Dios. Dios se ha comunicado con el hombre a lo largo de su historia de mil maneras, de mil formas, incluso encarnándose en la persona de Jesús de Nazaret, su Hijo muy amado. Ahora llega el tiempo de dar un paso más en el conocimiento de Dios, por eso Dios ha querido encarnarse en mujer.
Pero eso es una locura, no hay forma humana de entenderlo.
¿Acaso el nacimiento de Jesús del vientre de una virgen tenía una lógica humana?
Ya pero la virginidad de María es un dogma de fe
Déjalo solo en fe. Solo la fe basta para entender las cosas de Dios, no hace falta que sean dogmas.
¿Pero, entonces debo entender que tú eres la encarnación de Jesucristo pero en mujer?
No. Soy el mismo Cristo sí, porque soy la encarnación de Dios, no de Jesucristo como hombre, sino como Dios.
Y, se supone que tiene que repetirse la historia, que tienes que acabar crucificada y resucitar a los tres días, …
No. Realmente no sé qué tiene pensado el Padre para mí. Pero sí conservo el mismo deseo de que se haga su voluntad y no la mía.
Come por favor, que se nos va a enfriar la sopa.
La Comunidad El Cayado del Maestro la formaban inicialmente compañeros de la facultad de teología: Estos son sus perfiles. Eva María, laica; Marta laica que tras pasar por el noviciado de las dominicas decidió salirse del convento pero seguir su formación en teología; Elena, religiosa, de la orden de las Trinitarias; Lucía, laica, miembro de un grupo cristiano y fundadora del grupo musical del mismo; Ana, es la mujer de un pastor evangélico; Paloma, laica, médico, voluntaria de una ONG, tras su experiencia en el terremoto de Haití de 2010 decidió estudiar teología; Isabel, misionera en África, tras muchos años de servicio un problema de salud le obligó a regresar a su tierra, y como la recuperación se preveía lenta decidió cursar la carrera de teología; Rodrigo, seminarista entonces, hoy ya sacerdote; Alberto, religioso escolapio, hoy también sacerdote; Pablo, laico, informático de profesión, cuando se quedó en paro decidió hacer teología; Julián, laico, jubilado por una discapacidad visual, decidió ocupar su tiempo de jubilación cursando teología; Hassan, imán de una mezquita, los encuentros interreligiosos le han animado a ampliar su formación teológica; y Víctor, laico, se confiesa agnóstico pero con muchas ganas de creer.
Residencia sacerdotal Santo Tomás. Comedor de invitados.
¿Cuándo empezaste a saber que… o sentir que eras especial, distinta, Dios …?
Ese es el primer paso, reconocerse como el hijo o la hija muy amada del Padre. El día que me descubrí así, ese día empezó mi misión.
¿Ya pero cuándo y cómo fue?
De siempre me ha gustado ir a la montaña. Un día subí a un monte, el Bayo. cuando alcanzas la cima desde el borde de la sierra puedes ver toda la llanada. Si te acercas al precipicio la sensación es impresionante. Aquel día me acerqué demasiado, un golpe de viento me desequilibró y por un momento sentí que me precipitaba al vacío. Ahí sentí unos brazos que me sujetaban y me volvían a tierra firme. Entonces sentí, no puedo asegurar que escuche, pero sí la sentí, una voz que me decía, “Tú eres mi Hija muy amada, mi predilecta”. Me senté en la hierba y miré al cielo. Entonces volví a escuchar la voz “ve y completa mi rostro a los ojos de tus hermanos.”
¿Hablaste de esto con alguien?
Al principio solo con mi madre, con Laura. Años más tarde se lo he contado a mis amigos.
¿Y que te dijo tu madre?
Nada. Vi que se le humedecían los ojos y me abrazó durante un largo rato.
Laura y Enrique han sido un matrimonio normal, sin sobresaltos. Enrique trabajaba de mecánico en un taller. era bastante más mayor que Laura. Laura siempre se había dedicado a la costura. Cuando Enrique tuvo el accidente tuvieron la oportunidad de trasladarse a Vitoria-Gasteiz para hacerse cargo de una franquicia. Enrique tuvo una invalidez parcial y aunque no podía volver al taller sí pudo atender la tienda en la que trabajaron los dos hasta su muerte. Después le cogió el relevo David, el segundo hijo de la familia. Los domingos acudían a la Iglesia y eran muy dados a las tradiciones religiosas. Laura y Enrique solían hacer visitas a las iglesias también durante los días de la semana, aunque solo fueran cinco minutos procuraban dejarse caer por alguna Iglesia y elevar una oración.
Residencia sacerdotal Santo Tomás. Comedor de invitados.
Eva María ¿Por qué quieres hablar con el Santo Padre, para que te reconozca públicamente como la Hija de Dios?
No. Eso es un acto muy personal de cada cual. Quiero ayudarle a preparar a la Iglesia para una Vida Nueva, una nueva realidad, una nueva oportunidad de la humanidad para acercarse más al conocimiento de Dios. Quiero ofrecerle mi apoyo, ser su Cayado para lo que le queda de pontificado.
¿Y qué le vas a decir al Papa que tiene que hacer?
Que siga confiando en Ruah, en el Espíritu Santo que siempre les ha iluminado y acompañado. Que cuide mucho el diálogo ecuménico e interreligioso, es clave para el progreso de la humanidad.
Para eso no hace falta que se lo diga ninguna Eva María, el santo Padre es consciente de ello, me consta.
Sí, pero el nuevo paso será empezar a poner a Dios otros rostros que hasta hoy se le han evitado poner. El primero el de mujer.
Pero no entiendo la importancia de poner un rostro de mujer a Dios, Dios se hizo Hombre cuando decidió que la Palabra se hiciera Carne y llevamos dos mil años con esa imagen sin ningún problema.
Primero, eso no es cierto, y lo sabes. Y segundo, con Jesucristo se completó el mensaje de Dios a los hombres, pero no su imagen, dos mil años después seguís con una imagen incompleta de Dios. Jesucristo dijo que Dios estaba en los sencillos, en los humildes, en los pecadores, en los pobres de la Tierra, en los excluidos, marginados, explotados, y en todos ellos Dios tiene un rostro de hombre y también de mujer. Por eso necesito decirle al Papa que insista en poner a Dios todos los rostros de la Tierra, que los abrace, que los bese, que reconozca a Dios en ellos.
Come pescado, es una trucha asalmonada, muy buena.
Un aspecto que ha identificado a Eva María es que nadie ha conseguido ni que sea identificada con una ideología, o un bando o un grupo de poder, ni a favor ni en contra. Nadie la ha podido convertir ni en icono de su causa ni acusarla de formar parte de una causa concreta. Es tal el equilibrio que mantienen ella y el resto de los de su comunidad que solo se les puede identificar con ellos mismos. Lo mismo a la hora de juzgar su pertenencia a la Iglesia católica, no critica nada ni se salta nada, nadie le puede acusar de incumplir normas o mandamientos, de no practicar los sacramentos con respeto, es su modo de ser y de comportarse lo que la hace por encima de todo esto. En sus formas ninguna religión podría sentirse atacada, pero su modo de mirar la vida y de vivirla alcanza a cuestionar a todos, pero sin violencia.
Residencia sacerdotal Santo Tomás. Comedor de invitados.
Dices que eres la encarnación de Dios para los hombres y mujeres de hoy. Pensemos que te compro eso. ¿Qué pasa con los de la vieja Iglesia, conmigo, con mis hermanos consagrados, con quienes venimos defendiendo la Iglesia que hemos conocido, la que nos legaron nuestros padres? ¿Tenemos que echarnos a un lado?
Claro que no. Lo sabes, y además, tú nunca lo harías. No, el ejercicio que tienes que hacer tú y todo el mundo es pedirle a Dios como el ciego de Jericó, “¡Señor, que vea!”
Pero solo veo una joven mujer.
Abre los ojos de tu corazón. Descubre lo que tú mismo predicas, a Dios en el prójimo, en todo prójimo. Pero no como una alegoría, sino realmente. Habéis dejado que otros usen la imagen de un Dios mujer clavado en la cruz como blasfemia, como ataque a la Iglesia, cuando la respuesta correcta hubiese sido “comprar esa imagen”. Os ofendéis porque pongan rostros esperpénticos a Cristo cuando no deseo otra cosa que hacer míos todos vuestros rostros.
¿Y qué hacemos con toda la iconografía religiosa? ¿La cambiamos por las nuevas obras blasfemas y las ponemos en nuestras iglesias y catedrales?
Creo que ya te lo he dicho. No he venido a abolir nada, sino a dar plenitud. Todo ese arte es un rico patrimonio que es de justicia conservar y respetar. Pero no son la Obra de Dios, la Obra de Dios es el ser humano, la Creación toda.
¿Una manzana de postre?
¿Es un guiño al Génesis?
Vaya, veo que tienes sorna.
¿y tú sentido del humor? Sí, acepto esa manzana.
El grupo de la Comunidad se dispersó al día siguiente de la detención de Eva María. Al parecer tenían la consigna de hacerlo si algo le pasaba a Eva María. Todos eran conscientes de que grupos radicales habían puesto sus miradas en las actividades y las informaciones que sobre Eva María y sobre la comunidad del Cayado del Maestro aparecían en las redes sociales y en algún medio de comunicación. Eva María había asumido su rol en el grupo y pasó a liderarlo. Pero lo que preocupaba más a la Iglesia no eran las personas concretas de esta comunidad, sino el ambiente que se empezaba a vivir en parroquias, colegios, conventos, grupos y comunidades. Como una pandemia empezaron a surgir focos en todas partes. Y muchos ni sabían ni conocían la existencia de Eva María, pero su modo de leer y vivir el Evangelio se hacía más popular.
Residencia sacerdotal Santo Tomás. Comedor de invitados.
Estarás cansada, ha sido un día duro. Y para mí también.
Sí. cierto.
¿Desayunamos juntos mañana?
Sí, claro.
Buenas noches entonces. Samuel, acompáñala a su cuarto por favor.
Sí, P. Umberto. Por favor.
P. Umberto.
¿Sí, Eva María?
¿Me da usted su bendición?
Benedicat vos omnipotens Deus, Pater, et Filius, et Spiritus Sanctus. Amén.
Amén.
Cuando se empezó a investigar a Eva María se buscaron datos sobre sus actividades económicas y sobre sus relaciones afectivas, de pareja. ¡No tenía una simple cuenta bancaria! ¡No constaban propiedades de ningún tipo!, es como si viviese del aire. Se alojaba en casas de otras personas, amigos fundamentalmente, y siempre había alguien que corría con sus gastos ordinarios de ropa, calzado, comida. Respecto de posibles relaciones afectivas … con todos y con ninguno, es decir no hay constancia de lazos afectivos más pronunciados sobre unas personas que sobre otras. Sí, su familia, su comunidad, todo muy sencillo, muy humano, muy limpio. Donde se encontraban celebraban la Eucaristía con sacerdotes del grupo o afines, o bien asistían a las celebraciones de otras parroquias o comunidades. Muchos testigos han destacado su actitud de oración y adoración. Hincada de rodillas en una iglesia, una capilla, en la cima de una montaña o a orillas del mar. Largas horas de silencio.
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