El arzobispo de Granada reza, con las Bienaventuranzas, por el teólogo del pueblo Gil Tamayo: "Ayer ofrecí la Eucaristía por José María Castillo"
Como decía José María, lo que distingue a un cristiano del que no lo es se produce cuando “solo queda en pie el amor y la bondad y el comportamiento que cada cual ha tenido en su vida con sus semejantes”
| José María Gil Tamayo, arzobispo de Granada
Ayer ofrecí la Eucaristía por José María Castillo. El final de la vida de una persona, aunque sea de edad avanzada, siempre es sorpresiva. Llevo poco tiempo en Granada y no conocía personalmente a José María Castillo.
Ahora lo importante no es el juicio de los hombres, tan falible muchas veces, sino el balance de su larga y vida que nuestro Padre Dios hace con misericordia ya que, como decía José María, lo que distingue a un cristiano del que no lo es se produce cuando “solo queda en pie el amor y la bondad y el comportamiento que cada cual ha tenido en su vida con sus semejantes”. En definitiva Mateo 25 y las Bienaventuranzas, como dice el Papa Francisco. Esa ha sido mi oración por él.
