BICHOS RAROS ©
Mi hijo mayor me mandó hace unos años esta confesión y demanda, a la que él tituló:
LOS BICHOS RAROS
Sin más por hoy, un saludo.
LOS BICHOS RAROS
Cada vez más me doy cuenta de que pertenezco a una minoría extrañísima en España. Lamento reconocer que nuestra familia no es políticamente correcta, ya que en ella no hay ningún musulmán, preso, homosexual, cineasta o actor de moda, político separatista, drogadicto, maltratador/a, maltratada/o, inmigrante ilegal, abortos provocados o eutanasias activas. Nuestro problema es que vivimos en Madrid, los niños estudian, confieso que en un centro concertado, y los mayores trabajamos y pagamos los impuestos. Para empeorar la situación somos católicos y muchos de nosotros solemos ir a Misa los domingos (ya se sabe… la juventud).
Me gustaría preguntarle al presidente del Gobierno -entonces era Zapatero pero, hoy, en el tema que se toca da igual - si tiene algún plan para minorías como la nuestra, a la que lo que le preocupa es que el país vaya para adelante económicamente, la seguridad ciudadana, el desempleo, el terrorismo, que funcione la justicia, la educación, la sanidad y las infraestructuras y que en lo demás nos dejen en paz. Como sugerencia, podían empezar por tratarnos al menos como al burro ibérico y crear una Fundación para la Protección de la Familia Autóctona española, y declararnos especie protegida en peligro de extinción.
Sin más por hoy, un saludo.