FAMILIA PERFECTA ¿Imposible?¿Posible? Cómo?
FAMILIA PERFECTA
¿Imposible?¿Posible? Cómo?
El tema de la felicidad y la perfección en la familia ha sido tratado en varias obras de teatro, novela, cine y, por supuesto, de ayuda familiar. Algunos ejemplos: en el cine: The perfect Family (2011), La familia perfecta, de Anne Rentor; “La familia casi perfecta” (Relative Strangers. 2006), de Greg Glienna. Una familia feliz, novela de David Safier (2012). Skylab (Julie Delpy, 2011), película-comedia sobre los momentos felices de tres familias en un cumpleaños Y otras obras sobre ayuda familiar, felicidad en familia, cómo tener una familia feliz, guía para una familia feliz, etc.
Soy consciente de que el título “Familia perfecta”, a secas, despierta un fuerte rechazo o una sonrisa irónica ante lo que se considera una utopía irrealizable. ¡”No existe la familia perfecta!”¡Es un absurdo en el mundo actual! ¡Ni la sagrada familia de Nazaret consiguió ese ideal! Por este posible rechazo añadí un subtítulo para justificar no solo la posibilidad e imposibilidad de la perfección y felicidad para el grupo familiar, sino el camino para poder llegar a la meta propuesta.
Tenga presente el lector que el título y subtítulo del presente blog (Familia perfecta. ¿Posible?¿Imposible? y ¿Cómo?) apuntan a una orientación humano-cristiana sobre la comunidad familiar en el contexto de “Ser y vivir hoy”, un blog en RD que en adelante puede titularse “Cómo ser y vivir hoy en familia” El interrogante de ¿posible? Se convertirá en una admiración condicionada ¡posible!, si, para el escaso porcentaje de familias que, con un mínimo de los derechos de la familia, sus miembros cumplen las condiciones de respeto, responsabilidad, amor mutuo y fe coherente. Los interrogantes de ¿imposible? está fundamentado en la inmensa cantidad de obstáculos, dificultades y enemigos que padece la comunidad familiar bombardeada por dentro y desde fuera. Para que el blog sobre la “Familia perfecta” no termine en “derrota” total, el último interrogante, el ¿Cómo? propondrá, a modo de bote salvavidas, caminos, medios y ayudas para que las familias puedan llegar a las dos metas propuestas de felicidad y perfección.
A los lectores partidarios del “imposible”, le recuerdo la de veces que ellos mismos han felicitado y deseado a los novios toda clase de bienestar. De manera indirecta, y a juzgar por los significados de felicidad y perfección, están deseando un matrimonio feliz-perfecto y una familia futura feliz –perfecta. ¿Desearon algo imposible o posible? ¿Fueron frases de cortesía o de pura hipocresía?
Sin entrar en polémica, los artículos del blog expondrán el tema de Familia perfecta como la meta (el monte Everest en sus dos cimas más altas) hacia la que se dirigen los futuros cónyuges y padres de familia. Y junto a la meta, analizaremos la situación actual de un gran porcentaje de grupos familiares. El resultado de la confrontación entre la meta y la situación familiar no puede ser más contundente y desolador: la vida matrimonial y familiar implica muchos riesgos que la convierten en una aventura “ casi imposible”.
Por lo tanto, y por mayoría absoluta, se impone plantear el interrogante de “imposible” ante la cruda realidad de las familias bombardeadas por múltiples dificultades, obstáculos y enemigos externos e internos. Ahí encontramos las causas que explican el por qué de una difícil felicidad y perfección en la vida matrimonial y familiar. Son las mismas causas con las que se enfrentará la “ingenua pareja”, convencida en el día de su boda y durante “la luna de miel” que ellos serán una excepción y que podrán llegar al Everest de un matrimonio feliz y perfecto tal y como lo planean. Y que su futura familia también podrá conseguir los dos picos más altos, el de la felicidad y el de la perfección.
¿El sueño será realidad? Los novios cuentan con el apoyo de quienes unánimemente repiten: que “tengáis todo bien y que nada malo os suceda”. Aunque no lo expresan abiertamente, sí quieren la felicidad y por tanto la perfección para el futuro matrimonio y la futura familia.
Además, los novios se apoyan en el testimonio de un porcentaje, mínimo ciertamente, que ha logrado la felicidad-perfección en sus años de casados, de padres y hasta de abuelos. Las familias experimentadas, al hacer balance de los días malos y buenos, felices o desgraciados, comprueban que fue mayor el número de días “felices-perfectos” que lo días negativos, sin felicidad ni perfección alguna. Luego, de facto, para ellos, ¡es posible una familia feliz y perfecta! ¡Habrá que escuchar cómo llegaron a los dos picos más altos del Everest conyugal y familiar!
Entonces, ¿qué sucederá? El tiempo tiene la palabra. Pero, evitemos confusiones y concretemos los criterios y vivencias sobre familia, felicidad y perfección.
Familia y familia feliz
Para evitar confusiones expondré varias perspectivas que admite la familia.
Como un grupo humano, vinculado por la sangre, el amor, el respeto, la responsabilidad y la ayuda mutua.
Como la comunidad de padres, hijos y familiares que se aman y se ayudan mutuamente para su realización personal.
Como el fundamento de la sociedad que goza del mínimo de sus derechos humanos y que por su parte procura el bien de la comunidad. Es la célula social donde varias personas viven según la dignidad humana. Trabajan por su realización personal y para engrandecer a la Patria.
Como grupo de creyentes. Es la comunión de personas de fe y práctica religiosa que aman a Dios y viven según su religión. La familia católica comparte la fe y la gracia de Cristo como corresponde a una “pequeña iglesia doméstica”-
¿La felicidad en la familia? Será diferente según sea su situación socio-política y el grado en que se realicen sus necesidades y esperanzas, sus ideales y aspiraciones, y, sobre todo, el anhelo de toda persona de amar y de ser amada.
Perfección y familia perfecta
Según la RAE, perfecto significa 1. adj. Que tiene el mayor grado posible de bondad o excelencia en su línea. 2. adj. Que posee el grado máximo de una determinada
cualidad o defecto. Y entre los vocablos sinónimos de perfecto destacamos: acabado, completo, inmejorable
¿Familia perfecta? La perfección corresponde al grupo familiar que reúna todos los rasgos fundamentales. Porque felicidad y perfección son vivencias que están unidas por el “todo”. La felicidad exige que “todas” las aspiraciones y necesidades se hagan presentes en la persona, en la pareja y en la comunidad de padres e hijos. Y la perfección, matrimonio perfecto, familia perfecta, se consigue en tanto en cuanto sean realidad para los miembros de familia, las necesidades, aspiraciones, deseos y, sobre todo el impulso de amar y de ser amado. Ciertamente se trata de una meta muy difícil pero no imposible de conseguir.
Doble fuente
El tema de la familia ha sido objeto de mi tarea pastoral, por más de cincuenta años, y con varias publicaciones en:
Arequipa (Perú). Colaboración en Solución al problema de la vida, Sígueme 1969.
La sociedad doméstica o familia 493-526
Lima (Perú). Hacia una familia cristiana en Perú (1972-1974). CCPF Lima
Lima. Familia y población. Ante un reto. Paulinas 1974
Caracas. Nuestros niños de hoy, ¿La familia del año dos mil? Trípode 1979
Guía para novios y casados. Ediciones paulinas 1981 y 2002.
Guía para una familia feliz, Ediciones Paulinas 1982
Madrid. La opción del cristiano. II. La comunión en Cristo. Ante Dios, la persona,
el sexo, el matrimonio y la familia, Atenas 1985, p. 231-398
Madrid. Matrimonio, familia y felicidad. Interrogantes y criterios básicos. Atenas, Madrid 1991. (En Madrid, solamente publicaciones, no apostolado)
México DF. Para una vida digna. Las respuestas de la Evangelium Vitae. Imdosoc 1998
Murcia. Familia humana y cristiana. 5 Condiciones. Ucam 2005.
Madrid (2008 y ss). Artículos en Religión digital sobre familia y sobre la respuesta a las preguntas del Papa Francisco sobre la familia.
En este material y en la experiencia pastoral están los fundamentos para escribir en el 2014 sobre el tema de la Familia perfecta
¿Imposible?¿Posible? Cómo?
El tema de la felicidad y la perfección en la familia ha sido tratado en varias obras de teatro, novela, cine y, por supuesto, de ayuda familiar. Algunos ejemplos: en el cine: The perfect Family (2011), La familia perfecta, de Anne Rentor; “La familia casi perfecta” (Relative Strangers. 2006), de Greg Glienna. Una familia feliz, novela de David Safier (2012). Skylab (Julie Delpy, 2011), película-comedia sobre los momentos felices de tres familias en un cumpleaños Y otras obras sobre ayuda familiar, felicidad en familia, cómo tener una familia feliz, guía para una familia feliz, etc.
Soy consciente de que el título “Familia perfecta”, a secas, despierta un fuerte rechazo o una sonrisa irónica ante lo que se considera una utopía irrealizable. ¡”No existe la familia perfecta!”¡Es un absurdo en el mundo actual! ¡Ni la sagrada familia de Nazaret consiguió ese ideal! Por este posible rechazo añadí un subtítulo para justificar no solo la posibilidad e imposibilidad de la perfección y felicidad para el grupo familiar, sino el camino para poder llegar a la meta propuesta.
Tenga presente el lector que el título y subtítulo del presente blog (Familia perfecta. ¿Posible?¿Imposible? y ¿Cómo?) apuntan a una orientación humano-cristiana sobre la comunidad familiar en el contexto de “Ser y vivir hoy”, un blog en RD que en adelante puede titularse “Cómo ser y vivir hoy en familia” El interrogante de ¿posible? Se convertirá en una admiración condicionada ¡posible!, si, para el escaso porcentaje de familias que, con un mínimo de los derechos de la familia, sus miembros cumplen las condiciones de respeto, responsabilidad, amor mutuo y fe coherente. Los interrogantes de ¿imposible? está fundamentado en la inmensa cantidad de obstáculos, dificultades y enemigos que padece la comunidad familiar bombardeada por dentro y desde fuera. Para que el blog sobre la “Familia perfecta” no termine en “derrota” total, el último interrogante, el ¿Cómo? propondrá, a modo de bote salvavidas, caminos, medios y ayudas para que las familias puedan llegar a las dos metas propuestas de felicidad y perfección.
A los lectores partidarios del “imposible”, le recuerdo la de veces que ellos mismos han felicitado y deseado a los novios toda clase de bienestar. De manera indirecta, y a juzgar por los significados de felicidad y perfección, están deseando un matrimonio feliz-perfecto y una familia futura feliz –perfecta. ¿Desearon algo imposible o posible? ¿Fueron frases de cortesía o de pura hipocresía?
Sin entrar en polémica, los artículos del blog expondrán el tema de Familia perfecta como la meta (el monte Everest en sus dos cimas más altas) hacia la que se dirigen los futuros cónyuges y padres de familia. Y junto a la meta, analizaremos la situación actual de un gran porcentaje de grupos familiares. El resultado de la confrontación entre la meta y la situación familiar no puede ser más contundente y desolador: la vida matrimonial y familiar implica muchos riesgos que la convierten en una aventura “ casi imposible”.
Por lo tanto, y por mayoría absoluta, se impone plantear el interrogante de “imposible” ante la cruda realidad de las familias bombardeadas por múltiples dificultades, obstáculos y enemigos externos e internos. Ahí encontramos las causas que explican el por qué de una difícil felicidad y perfección en la vida matrimonial y familiar. Son las mismas causas con las que se enfrentará la “ingenua pareja”, convencida en el día de su boda y durante “la luna de miel” que ellos serán una excepción y que podrán llegar al Everest de un matrimonio feliz y perfecto tal y como lo planean. Y que su futura familia también podrá conseguir los dos picos más altos, el de la felicidad y el de la perfección.
¿El sueño será realidad? Los novios cuentan con el apoyo de quienes unánimemente repiten: que “tengáis todo bien y que nada malo os suceda”. Aunque no lo expresan abiertamente, sí quieren la felicidad y por tanto la perfección para el futuro matrimonio y la futura familia.
Además, los novios se apoyan en el testimonio de un porcentaje, mínimo ciertamente, que ha logrado la felicidad-perfección en sus años de casados, de padres y hasta de abuelos. Las familias experimentadas, al hacer balance de los días malos y buenos, felices o desgraciados, comprueban que fue mayor el número de días “felices-perfectos” que lo días negativos, sin felicidad ni perfección alguna. Luego, de facto, para ellos, ¡es posible una familia feliz y perfecta! ¡Habrá que escuchar cómo llegaron a los dos picos más altos del Everest conyugal y familiar!
Entonces, ¿qué sucederá? El tiempo tiene la palabra. Pero, evitemos confusiones y concretemos los criterios y vivencias sobre familia, felicidad y perfección.
Familia y familia feliz
Para evitar confusiones expondré varias perspectivas que admite la familia.
Como un grupo humano, vinculado por la sangre, el amor, el respeto, la responsabilidad y la ayuda mutua.
Como la comunidad de padres, hijos y familiares que se aman y se ayudan mutuamente para su realización personal.
Como el fundamento de la sociedad que goza del mínimo de sus derechos humanos y que por su parte procura el bien de la comunidad. Es la célula social donde varias personas viven según la dignidad humana. Trabajan por su realización personal y para engrandecer a la Patria.
Como grupo de creyentes. Es la comunión de personas de fe y práctica religiosa que aman a Dios y viven según su religión. La familia católica comparte la fe y la gracia de Cristo como corresponde a una “pequeña iglesia doméstica”-
¿La felicidad en la familia? Será diferente según sea su situación socio-política y el grado en que se realicen sus necesidades y esperanzas, sus ideales y aspiraciones, y, sobre todo, el anhelo de toda persona de amar y de ser amada.
Perfección y familia perfecta
Según la RAE, perfecto significa 1. adj. Que tiene el mayor grado posible de bondad o excelencia en su línea. 2. adj. Que posee el grado máximo de una determinada
cualidad o defecto. Y entre los vocablos sinónimos de perfecto destacamos: acabado, completo, inmejorable
¿Familia perfecta? La perfección corresponde al grupo familiar que reúna todos los rasgos fundamentales. Porque felicidad y perfección son vivencias que están unidas por el “todo”. La felicidad exige que “todas” las aspiraciones y necesidades se hagan presentes en la persona, en la pareja y en la comunidad de padres e hijos. Y la perfección, matrimonio perfecto, familia perfecta, se consigue en tanto en cuanto sean realidad para los miembros de familia, las necesidades, aspiraciones, deseos y, sobre todo el impulso de amar y de ser amado. Ciertamente se trata de una meta muy difícil pero no imposible de conseguir.
Doble fuente
El tema de la familia ha sido objeto de mi tarea pastoral, por más de cincuenta años, y con varias publicaciones en:
Arequipa (Perú). Colaboración en Solución al problema de la vida, Sígueme 1969.
La sociedad doméstica o familia 493-526
Lima (Perú). Hacia una familia cristiana en Perú (1972-1974). CCPF Lima
Lima. Familia y población. Ante un reto. Paulinas 1974
Caracas. Nuestros niños de hoy, ¿La familia del año dos mil? Trípode 1979
Guía para novios y casados. Ediciones paulinas 1981 y 2002.
Guía para una familia feliz, Ediciones Paulinas 1982
Madrid. La opción del cristiano. II. La comunión en Cristo. Ante Dios, la persona,
el sexo, el matrimonio y la familia, Atenas 1985, p. 231-398
Madrid. Matrimonio, familia y felicidad. Interrogantes y criterios básicos. Atenas, Madrid 1991. (En Madrid, solamente publicaciones, no apostolado)
México DF. Para una vida digna. Las respuestas de la Evangelium Vitae. Imdosoc 1998
Murcia. Familia humana y cristiana. 5 Condiciones. Ucam 2005.
Madrid (2008 y ss). Artículos en Religión digital sobre familia y sobre la respuesta a las preguntas del Papa Francisco sobre la familia.
En este material y en la experiencia pastoral están los fundamentos para escribir en el 2014 sobre el tema de la Familia perfecta