Jornadas 'Alianzas para impulsar la innovación tecnológica y digital en el tercer sector' Empresas y ONG, unidas por la tecnología y el bien común
Celebradas en ESADE gracias al impulso de la Fundación Chávarri, participaron responsables de Telefónica, Worldreader y la Fundación Secretariado Gitano
"La tecnología ha venido y se tiene que quedar"
Los expertos pidieron “colaboración con las universidades”, para poder poner en marcha proyectos de investigación a medio plazo
Los expertos pidieron “colaboración con las universidades”, para poder poner en marcha proyectos de investigación a medio plazo
¿Cuáles son los retos, incomprensiones y puntos de encuentro entre las grandes empresas y las ONG? ¿Es posible avanzar en el tercer sector sin tener en cuenta a los beneficiarios, o a los grandes inversores? ¿Cuáles son las alianzas factibles, especialmente en el ámbito tecnológico? A estas y otras preguntas trataron de dar respuesta ayer varios expertos que participaron en la Jornada.
Moderados por Ignasi Carreras, tres primeros espadas de la empresa, el emprendimiento y las ONG dieron su punto de vista. Colin Mcelwee, de Worldreader; Arantxa Díaz -Lladó, Directora de Innovación Sostenible y Diversidad de Telefónica; y Arántzazu Fernández de la Fundación Secretariado Gitano, ofrecieron sus experiencias, problemas y visiones de futuro de una coalición (empresa-solidaridad) con una visión integradora: la del bien común.
Derecho a leer
Así, Mcelwee rememoró el trabajo de Worldreader por “el derecho a leer” desde hace más de una década, momento en el que han llevado libros a 13 millones de personas, la mayoría en África subsahariana. “Tenemos millones de libros africanos y asiáticos en la nube, y damos acceso por e-readers y móviles”, apuntó, recordando que la tecnología es “una forma de llevar libros al mundo donde el papel era imposible llegar”.
El proyecto es muy intuitivo, aunque la primera intención, que era dotar de kindle a todos los usuarios, fue un fracaso. “El 40% no funcionaban después de algunos meses”. Por eso, comenzaron a trabajar con móviles y otras estructuras. “Hoy trabajamos con 600 partners en todo el mundo”, explicó, dejando claro que “no somos una ONG, somos una entidad de datos”.
Proyectos sostenibles
Por su parte, la directora de Innovación Sostenible y Diversidad de Telefónica abundó en el proyecto, que cumple 5 años, y que consigue “impulsar iniciativas de intraemprendimiento”, de un año de duración, al término del cual “si se demuestra un modelo de negocio detrás, con un impacto social y medioambiental positivo”, se financian y dan soporte. “Hacemos un 'concurso de belleza' entre proyectos sostenibles”, destacó Arantxa Díaz-Lladó. Uno de los más conocidos fue el de la accesibilidad para personas sordas y ciegas. “Demostramos que el proyecto tenía viabilidad, lo financiamos, y hoy está implantado dentro de Movistar+”.
Por su parte, Aranzazu Fernández, de la Fundación Secretariado Gitano, relató su experiencia de colaboración con la Fundacción Accenture para la incorporación de la población gitana a la vida laboral. “Fuimos los pioneros. Hoy, más de un millar de instituciones del sector utilizan esta herramienta”.
La propuesta, “Empleando digital”, busca evaluar la empleabilidad de cada persona, teniendo en cuenta sus necesidades y las de su comunidad, para ir mejorando. En el proceso, se encontraron con cierta incomprensión desde la propia organización, que pensaba que “la digitalización no iba a afectar tanto a nuestros usuarios”. Pero “la tecnología ha venido y se tiene que quedar. Partíamos de muchos prejuicios previos ('esto para los nuestros no es'). Podemos formar a gente que no tiene el graduado en ESO pero que puede llegar a programador. La tecnología nos puede ayudar mucho”.
Desconocimiento mutuo
Todos los ponentes coincidieron en que “hay un desconocimiento mutuo entre el funcionamiento de las ONG y de las empresas”. En el turno posterior de preguntas, Colin resaltó que “con la tecnología podemos hacer más accesible el mundo”. En el caso de Worldreader, se han introducido mejoras en el tamaño de las letras (“Hay muchos niños en África que no pueden leer, que necesitan gafas”) o en sonido, para hacer accesibles los e-books a personas invidentes.
“Es imprescindible tener objetivos a largo plazo”, apuntó Arantxa, quien pidió “colaboración con las universidades”, para poder poner en marcha proyectos de investigación a medio plazo. Porque sin investigación es imposible plantear alianzas como éstas. Que son posibles.