Hoy se celebra el Día Internacional del Cooperante Padre Ángel: "Los cooperantes nos recuerdan que el mundo lo arreglamos entre todos"
"Ellos están cerca. Nuestros cooperantes no han abandonado, jugándose no sólo la vida, sino también la salud", sostiene el presidente de Mensajeros de la Paz
Hoy se celebra el Día Internacional del Cooperante, una jornada que quiere poner en valor a todas aquellas personas que, dentro y fuera de nuestras fronteras, se dejan la piel por construir un mundo mejor, por no dejar a nadie atrás. En tiempos de pandemia, "se han demostrado más importantes que nunca", tal y como nos cuenta el presidente de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel García.
"Los cooperantes nos recuerdan que el mundo no sólo lo arreglan los políticos, que tienen la obligación, para eso les pagamos; el mundo lo arreglamos entre todos", sostiene el religioso en conversación con RD. "En esta etapa, los cooperantes se han multiplicado, en su sentido más amplio: no había vecino que no bajase a hacerse cargo de su vecino si necesitaba ayuda, o que le hiciera la compra".
En los países en vías de desarrollo, donde el coronavirus azota en silencio, los cooperantes "son el vínculo que une dos mundos, que no se olvida de los que sufren lejos. Ellos están cerca. Nuestros cooperantes no han abandonado, jugándose no sólo la vida, sino también la salud", subraya el padre Ángel, quien se muestra convencido de que "ellos nos demuestran que vivimos en una sociedad rica, con valores".
Solidaridad a flor de piel
"Son nuestros santos de hoy", asegura el presidente de Mensajeros de la Paz, quien recuerda que en la iglesia de san Antón se 'venera' a la 'santa' Isa Solá, asesinada en Haití. "Cada vez necesitamos más su ejemplo, hay que ayudarles y acordarnos de ellos".
En un mundo en crisis, que también afecta al trabajo de las ONG, "la solidaridad nos sale a flor de piel, y los cooperantes nos lo demuestran. Son capaces de ver a la gente que sufre con sus ojos. Y no sólo lejos, también aquí. Hay filas de gente esperando para llenar sus bolsas de comida, que están llenando iglesias, particulares, ONG... Hay más solidaridad que nunca, estoy convencido", culmina el padre Ángel.