Convocados por la diócesis de Xochimilco, y a través de redes sociales, los obispos de la provincia eclesiástica de México, que comprende el territorio de la capital del país, se unieron en rosario virtual en sufragio por los fallecidos en el trágico evento que dejó 25 muertos y más de 70 lesionados el pasado lunes 3 de mayo en la línea 12 del metro de la capital.

Encabezados por Mons. Andrés Vargas Peña, y con la notoria y cada vez más usual ausencia del arzobispo Carlos Aguiar,Jesús Antonio Lerma Nolasco, obispo de Iztapalapa;vía telefónica, Adolfo Miguel Castaño Fonseca, de Azcapotzalco, y los obispos auxiliares de México, Luis Manuel Pérez Raygoza, Héctor Mario Pérez y Salvador González Morales desgranaron las cuentas del santo rosario la noche del 4 de mayo.

Al finalizar los misterios dolorosos, Varga Peña agradeció a los obispos el gesto de oración y unidad solicitando algunas palabras para expresar la cercanía de los pastores en los días de luto por el trágico accidente.

Mons. Jesús Antonio Lerma Nolasco consideró “significativo” el gesto de oración para todas las personas que fueron afectadas: Todas ellas viven en una sola ciudad, “unirnos con ellos es algo importante para que sientan que pedimos por ellos, somos solidarios con su dolor y quienes aun sufren físicamente el accidente, Dios les dé fortaleza para salir adelante”.

En su turno, Luis Manuel Pérez Raygoza, obispo auxiliar, confortó a quienes sufren citando el Libro de Job. Quienes vieron al bíblico personaje constataron que estaba “destrozado y vieron que era tan grande su dolor que permanecieron junto a él callados, sin decir absolutamente ninguna palabra durante algunos días, simplemente acompañándolo ante circunstancias como las que desafortunadamente estamos viviendo…” Aprovechó para garantizar su cercanía: “les amamos, les acompañamos en este dolor… Queremos manifestarles nuestra solidad, queremos hacerles patente nuestro amor, nuestra oración como pastores y, al mismo tiempo, asegurarles que todo aquello que esté a nuestro alcance, lo haremos”. Igualmente anunció la disposición de las distintas Cáritas y centros de escucha en la provincia eclesiástica para atender las necesidades de los afectados.

Mons. Adolfo Miguel Castaño Fonseca expresó la solidaridad en nombre de todo el presbiterio, religiosos y fieles de la diócesis de Azcapotzalco. Como sus colegas, ofreció igualmente la cercanía a los heridos y rogando al Señor por el eterno descanso de los fallecidos.

Finalmente, el obispo de Xochimilco, Andrés Vargas Peña, destacó que la Iglesia hiciera “causa común” para orar juntos: “La oración se dirige a Dios, pero también moldea nuestro corazón para hacernos cercanos a los hermanos que lo necesitan, para suscitar la creatividad en apoyarlos”. El obispo confía en que estas demostraciones vayan creciendo especialmente en la caridad y recordó que el santo rosario es un instrumento eficaz que el Papa “nos ha invitado a rezar con insistencia”. Puntualizó que, una vez las circunstancias sean propicias, él mismo y los sacerdotes de Xochimilco saldrán al encuentro de las familias: “Queremos salir y estar cerca de ustedes, gracias de corazón por unirse en la oración y que el Señor los cuide y los bendiga”. Finalmente, los obispos impartieron la bendición a todos los oyentes.

Tras el trágico hecho del 3 de mayo, el gobierno de México decretó tres días de luto nacional. Conforme a decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, la bandera nacional en edificios y plazas públicas ondeará a media asta en señal de “solidaridad y profundo dolor hacia las personas fallecidas y lesionadas, así como a sus respectivas familias”.