Francisco: "¡Confiemos en los jóvenes! Y, sobre todo, ¡confiemos en Dios: porque Él llama a cada uno!"
“Cuando tenía 17 años, era estudiante y trabajaba, tenía mis proyectos. No pensaba para nada en ser sacerdote. Pero un día entré en la parroquia… ¡y allí estaba Dios, esperándome!" "Dios sigue...