Los obispos de Mallorca, Tenerife y Orihuela-Alicante... Castillo, a los 'vacunajetas' : "Los primeros serán los últimos"
"A la vista de hechos como éste, uno comprende que haya tanta gente que no quiere ni oír hablar de la Religión. De “humanidad”, de “ejemplaridad” y de “Evangelio”…, “¡parole, parole, parole!”… "
"Sin duda, estos obispos han hecho lo que han hecho, no sólo con la conciencia tranquila, sino seguramente con el convencimiento de que esto es lo que tenían que hacer"
Los obispos de Mallorca, Tenerife y Orihuela-Alicante, a los que se ha sumado ("legalmente") el de Córdoba, se han vacunado contra el virus de la pandemia que nos azota. Con lo que, sirviéndose del cargo que ocupan, se han adelantado a millones de ciudadanos, que viven angustiados ante el posible contagio que a todos nos amenaza.
Sin duda, estos obispos han hecho lo que han hecho, no sólo con la conciencia tranquila, sino seguramente con el convencimiento de que esto es lo que tenían que hacer. Para ser más útiles en las diócesis que gobiernan y en los muchos e importantes asuntos que tienen que afrontar y resolver. Hasta aquí, estamos de acuerdo.
El problema, que yo veo, es que todo esto me parece que no cuadra con las leyes vigentes en nuestro país. Esto, ante todo. Pero, al tratarse de obispos, la cosa se complica. Porque los obispos – según dice la teología más ortodoxa – son los “sucesores de los apóstoles”. Y el Evangelio nos dice que Jesús les dijo a sus apóstoles que “los últimos serán los primeros, y los primeros serán los últimos” (Mc 10, 31; Mt 19, 30). Palabras del Señor que iban derechas a aquellos primeros apóstoles. Teniendo en cuenta que, según explican los estudiosos más entendidos en los Evangelios, esta sentencia de Jesús representa y exige “la inversión de las relaciones humanas” (Bultmann, H. G. Link, J. Baumgarten).
A la vista de hechos como éste, uno comprende que haya tanta gente que no quiere ni oír hablar de la Religión. De “humanidad”, de “ejemplaridad” y de “Evangelio”…, “¡parole, parole, parole!”…
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