Peregrinación a Belén con Ain Karen 2014, Año Internacional de la Alegría
(Emilio Pinto, Ain Karen).- El 5 de Enero de 2014 un grupo de peregrinos presidido por D. Daniel Gutiérrez llegará a Belén y nos ha prometido que presentará todas las peticiones que le hagamos llegar, ya sean para el niño Jesús o para los reyes Magos.
¿Qué pedir a un niño que acaba de nacer? Nacemos sin saberlo, vivimos sin sentirlo y morimos sin quererlo. A un niño más que pedirle, habría que darle: calor, cariño, comida... ¿Tenemos algo que ofrecer a ese Jesús que vuelve y vuelve a nacer por mucho que lo que quieran sea matarle y matarle?
¿Qué pedir a unos reyes que año tras año no consiguen terminar con las listas más necesarias del mundo? "Que haya Paz en Siria", y llevan años que no lo consiguen, "que deje de haber hambre, que haya más trabajo"...
Pero no podemos ser pesimistas, un pesimista solo es un vago criticando. Debemos de buscar lo que no se ve, pero sin embargo es lo más imprescindible de cualquier mundo:
¿Sale el sol por las mañanas? Si, sale.
¿Se mueve mi corazón sin yo tener que pensar en ello? Si, se mueve.
¿Brota la comida de la semilla? Brota, claro que brota...
Que no venga ningún vago criticón a decirnos que no tenemos motivos de alegría.
Al grano. El año 2013 había sido declarado por Naciones Unidas como el año Internacional de la Quinua. Yo, como usted, sin saber ni lo que es y cómo celebrarlo; Bueno, para no quedarnos con la duda, la Quinua es una planta alimenticia cultivada en la zona de los Andes desde hace más de 5000 años. Algo parecido a un cereal.
Pero el 2013 tiene tantos títulos que es difícil recordarlos todos. 2013 año internacional de las matemáticas, del agua, de los bosques, de las estadísticas... Yo, con tantas celebraciones, no doy para cervezas. Ni mi memoria para tanto recuerdo.
Así pues el año 2014 será el 2014 y al final del año es de lo que nos acordaremos y de felicitarnos eso sí.
Os propongo que este Santo cura se lleve debajo del brazo cientos y cientos de peticiones para los reyes, que pedir es gratis, y un décimo de lotería para pasarlo por la joroba del camello. Y pedir cosas, muchas, pero no os olvidéis de pedir felicidad, que es eso que si no se comparte se pierde. Y pedir imposibles, que ya estamos cansados de los posibles, y un buen jamón que no hace daño a nadie y un regalito aunque sea colonia." Pedid y se os dará".
Y para el niño, más que pedir, un buen biberón, un pijama que abrigue, y eso lo podemos hacer sin salir de casa, basta con buscar cerca de nosotros quien tiene un bebé en casa y llevarle algo. "Lo que a uno de estos pequeños hicisteis lo hacéis conmigo".
Pedid sin miedo que lleva más de 20 peregrinos para que le ayuden y van con Ain Karen, y hasta la compañía aérea EL AL les deja llevar exceso de peso por vuestras peticiones.
Y al pedir, ya es dar, cuando te acuerdas de los que nadie se acuerda, de Julián que se pasa las noches tirado en las calles de Madrid y por las mañanas pide en un semáforo. De María que sigue en el paro, de Pedro que no llega a fin de mes, de Juan y su espalda, de Luis y su elevada edad. De los que están hospitalizados, de los que no pueden comer, de los egoístas que no saben ni dar, de los políticos que les hace falta cambiar algo, del rey y sus operaciones de yerno, de mí, a mí me hace faltan muchas cosas, sobre todo me hace falta que te acuerdes de mí.
Querido Daniel gracias por ofrecerte a semejante tarea, las alforjas, la mente y tu corazón pesarán mucho más al ir que al volver. Queridos peregrinos: ¿cabe uno más? Contad conmigo, me parece que es una gran oportunidad, pedir sirve para saber qué importa más en nuestra vida.
A mi traedme alegría de esa que no se rompa, esa que no bombardee nadie, y que ni el hambre la arremeta. Alegría de la buena, alegría de Dios.
Y sea lo que sea el año 2014, yo lo declaro el año internacional de la alegría, alegría de saber que hay todavía mucha gente buena dispuesta a ayudarte, a rezar, a tocar tu parte invisible como quieren hacer DANIEL Y SU GRUPO.
Mañana estará lleno de peticiones este artículo o simplemente será señal de que "el otro" e incluso "yo mismo" soy como una Quinua, tendré todo un año para mí y nadie lo sabrá.