Queridos amigos; tengo de nuevo la oportunidad de iniciar una nueva etapa junto a vosotros, y lo hago, lo hacemos, porque como siempre, este espacio mío y vuestro es encuentro como su título indica. Lugar de compartir, de aprender juntos, y por qué no, también de soñar…

Retomamos este en un momento complicado en el que no sé cómo empezar… porque España, el mundo está de luto… cuanto dolor, cuanta inquietud e incertidumbre, cuanta inseguridad… esto y muchas más cosas son las que estamos viviendo y sintiendo en estos momentos en los que echamos de menos tantas cosas que antes nos parecían normales, pero el ser humano es así. Sólo cuando perdemos algo o alguien es cuando lo valoramos… El agua, todos abrimos el grifo y podemos lavarnos, ducharnos, ¡sobre todo ahora que se nos van arrugar las manos de tanto lavarlas!, pero como lo tenemos, no nos hemos parado a valorarlo. Internet ¡ahora estamos todo el día, pegados!! ¿Y si no lo tuviésemos? ¿Nos hemos parado a pensar? Las personas, nuestros seres más queridos, padres, abuelos, amigos, ¡cómo los necesitamos! Y más ahora… y así con todo…

Ante todo lo que estamos viviendo me pregunto: cuando pasé ¿seremos capaces de haber aprendido algo o volveremos a ser como siempre? Pensadlo antes de seguir leyendo…

¿Sabré valorar más lo que verdaderamente importa o me quedaré en la espuma, sin profundizar…?

No me gusta extenderme en lo que comparto con vosotros, porque lo mucho creo que cansa… Tendremos tiempo, si me lo permitís, pero por el momento lo dejamos aquí…

Gracias por seguir ahí. Seguiremos caminando. Con espinas que las hay, pero también con rosas que también las hay…