Cuando se celebra el 75º aniversario de la Declaración Universal Francisco denuncia "una vuelta atrás" en la defensa de los derechos humanos en el mundo
En la defensa de los derechos humanos, "a veces se vuelve hacia atrás". Rotunda reivindicación del papa Francisco, tras el rezo del ángelus, y cuando se conmemora el 75º aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de "todos aquellos que, sin proclamas en el día a día concreto, luchan y hablan en primera persona para defender los derechos de los que no cuentan".
"¿Seremos capaces, con la ayuda de Dios, de dar pasaos concretos hacia la paz? No es fácil, lo sabemos. Ciertos conflictos tienen raíces históricas y profundas, pero tenemos también el testimonio de hombres y mujeres que han trabajado, con sabiduría y con paciencia, por la convivencia pacífica. Que se siga su ejemplo, que se ponga todo el empeño para afrontar y remover todas las causas de los conflictos", demandó el Pontífice
En la defensa de los derechos humanos, "a veces se vuelve hacia atrás". Rotunda reivindicación del papa Francisco, tras el rezo del ángelus, y cuando se conmemora el 75º aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de "todos aquellos que, sin proclamas en el día a día concreto, luchan y hablan en primera persona para defender los derechos de los que no cuentan".
"Queridos hermanos, hace 75 años, el 10 de diciembre de 1948, se firmaba la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Gracias a ella se dieron muchos pasos adelante, pero aún faltan tantos y a veces lamentablemente se vuelve hacia atrás", comenzó indicando el Papa ante los miles de fieles que le escuchaban en la plaza de San Pedro, dos días después de que Estados Unidos vetase en las Naciones Unidas una resolución para el alto el fuego en Gaza, un conflicto que en dos meses ha causado ya la muerte de 17.000 personas.
"El compromiso por los derechos humanos nunca terminó y a este propósito estoy cerca de todos aquellos que luchan para defender los derechos de quienes no cuentan", añadió el Papa, quien mostró también su alegría por "la liberación de un número significativo de prisioneros armenios y azerbaiyanos", que consideró "una señal positiva para las relaciones entre Armenia y Azerbaiyán para la paz en el Cáucaso", invitado además a sus líderes "a concluir el tratado de paz".
Rezar por los buenos resultados de la COP28
"Dentro de unos días, concluirán los trabajos de la COP28 sobre el clima en Dubái. Recen para que se lleven a buenos resultados por el cuidado de nuestra por la Casa Común y de las poblaciones", señaló también el Papa, quien tampoco en esta ocasión se olvidó de rezar y pedir oraciones por quienes sufren las consecuencias de las guerras.
"¿Seremos capaces, con la ayuda de Dios, de dar pasos concretos hacia la paz? No es fácil, lo sabemos. Ciertos conflictos tienen raíces históricas y profundas, pero tenemos también el testimonio de hombres y mujeres que han trabajado, con sabiduría y con paciencia, por la convivencia pacífica. Que se siga su ejemplo, que se ponga todo el empeño para afrontar y remover todas las causas de los conflictos", demandó el Pontífice.
"Y a propósito de los derechos humanos -incidió-, que se proteja a los civiles, los hospitales, los lugares de culto, que se liberen a los rehenes y se garanticen las ayudas humanitarias. Y no olvidemos a la atormentada Ucrania, a Palestina, a Israel...", concluyó el Papa, a quien se ha visto ya muy recuperado tras la "inflamación pulmonar" que le obligó a guardar reposo en las últimas semanas y anular a última hora su deseado viaje a Dubai para participar en la COP28.
Etiquetas