Paglia aboga por que "la tercera dosis llegue pronto" a Roma El Vaticano será uno de los primeros países del mundo en sancionar a los empleados que no presenten el 'pasaporte covid'

La Santa Sede se convertirá en uno de los primeros estados del mundo en sancionar sin empleo a aquellos empleados que no dispongan de 'pasaporte covid' y que, por tanto, no puedan entrar a trabajar entre los muros vaticanos, según un decreto emitido por el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, y que concreta la normativa elaborada por la Gobernación de la Ciudad Estado. La norma entrará en vigor el próximo viernes.

Según adelanta Efe, la orden de Parolin añade la posibilidad de sancionar a los empleados vaticanos que no presenten el pertinente certificado sanitario. Ya en el decreto anterior se prohibía la entrada al territorio eclesiástico de quienes no cumplieran esta obligación, que no incluía a los fieles que acudan a ceremonias religiosas, al Angelus o a las audiencias de los miércoles. 

Ahora, según se lee en el decreto, "el personal que no esté en posesión de las certificaciones necesarias no podrá acceder al lugar de trabajo" y "será considerado como ausente injustificado y, durante la duración de la ausencia, no percibirá el sueldo".

Nuevas restricciones

Además, los trabajadores que no dispongan del certificado de vacunación del covid-19 o que hayan pasado la enfermedad podrán, "como alternativa, presentar un certificado de negatividad al virus Sars-Cov-2, expedido en Italia tras una prueba molecular o antigénica rápida", pero el coste será a cargo del trabajador.

Además, la Ciudad del Vaticano se reserva la posibilidad de aplicar nuevas restricciones a aquellas personas que procedan de países con "riesgo elevado de contagio". La decisión se toma "con el fin de adoptar todas las medidas adecuadas para prevenir, controlar y contrarrestar la emergencia de salud pública en el Estado de la Ciudad del Vaticano", según se lee en la ordenanza de la Gobernación, el gobierno de la Ciudad del Vaticano.

"Sanidad equitativa"

Por otro lado, el presidente de la Academia Pontificia por la Vida, Vincenzo Paglia, se mostró a favor de una tercera dosis para el personal vaticano, aunque dejó la decisión en el Papa. "Esa pregunta es para él y le dejaría a él la respuesta. Por mi parte, espero que la tercera dosis llegue pronto", destacó durante la presentación de la Asamblea anual de este organismo.

"Si la prioridad de los países occidentales son las vacunas -y de hecho estamos asistiendo al mayor esfuerzo de vacunación jamás realizado en la historia-, no debemos olvidar la necesidad de construir una sanidad equitativa a escala planetaria", subrayó Paglia, quien insistió en que "la brecha no sólo en cuanto a las vacunas, sino también en cuanto al acceso a la sanidad pública, debe superarse eliminando los problemas relacionados con la falta de instalaciones y gestionando de forma más inteligente los recursos destinados al tratamiento".