El de este año será un capítulo de carácter electivo del que saldrá el 88º Maestro General de la Orden, que asumirá el cargo por 9 años
Se trata del segundo capítulo general que la Orden celebra en Asia, tras el 276º, que tuvo lugar en Quezon City (Filipinas) en 1977
El Capítulo de Biên Hoà estará formado por 104 capitulares con voz y voto, pero además asistirán otros invitados, como representantes de las otras ramas de la familia dominicana
| AICA
(Aica).- Del 7 de julio al 4 de agosto la Orden de Predicadores celebrará en Vietnam su 290º capítulo general. Las reuniones de los padres dominicos se llevarán a cabo en el Seminario Mayor de Xuân Lộc, en la ciudad vietnamita de Biên Hoà.
Se trata del segundo capítulo general que la Orden celebra en Asia, tras el 276º, que tuvo lugar en Quezon City (Filipinas) en 1977. En la actualidad los capítulos se celebran cada 3 años y el Maestro de la Orden asume el cargo por 9 años, desde que se decidiera así en 1974, en el capítulo general de Madonna del Arco, Italia.
“Democracia dominicana”
Durante los capítulos generales, los representantes de los dominicos del mundo entero se reúnen para definir las grandes orientaciones de la vida de la Orden y revisar sus leyes. Los superiores de las provincias y los delegados elegidos por los frailes se reúnen para que lo vivido diariamente por todos sea decidido por todos. “Esta es la democracia dominicana desde la Edad Media”, destaca la Orden en su sitio web.
Todo lo hablado en el capítulo se traduce a las tres lenguas oficiales de la Orden: inglés, francés y español y “durante el capítulo se reza mucho, ya que al final la oración es lo que inspira las decisiones de los frailes”, agrega la nota.
Capítulo general de los Dominicos
El Capítulo de Biên Hoà estará formado por 104 capitulares con voz y voto, pero además asistirán otros invitados, como representantes de las otras ramas de la familia dominicana. Los priores provinciales tendrán que presentar al llegar al Capítulo la carta de confirmación de su elección a los examinadores testimoniales. Asimismo, delegados, invitados y moderadores presentarán sus invitaciones.
Se reúnen para que lo vivido diariamente por todos sea decidido por todos
El maestro de los dominicos, Bruno Cadoré
Elección del Maestro de la Orden
El de este año será un capítulo de carácter electivo del que saldrá el 88º Maestro General de la Orden. La elección del Maestro de la Orden se celebra el quinto día del capítulo, aunque no hayan llegado todos los electores. Así está marcado en el Libro de las constituciones. En este caso será el sábado 13 de julio, siempre que no haya complicaciones: podría salir elegido alguien que no esté presente (tendría que acudir cuanto antes) o podría suceder que el elegido no acepte y el Capítulo acepte su renuncia.
Tendrán voz para la elección del nuevo Maestro: los exmaestros de la Orden; los priores provinciales; los definidores del capítulo general designados por las provincias; los priores viceprovinciales y los vicarios generales y representantes de las provincias, vicariatos y casas bajo la jurisdicción inmediata del Maestro. En el Capítulo General de la Orden que se celebró en Bolonia en 1221 se decidió dar el nombre de “Maestro” al superior de toda la Orden. A lo largo de la historia se lo llamó Maestro General o General de la Orden. En la actualidad su nombre es Maestro de la Orden.
El primer maestro fue Santo Domingo de Guzmán, elegido en Bolonia (Italia) en el año 1220. Hasta 1804 el cargo de maestro era vitalicio (cesaba al ser aceptada su renuncia por el Capítulo General, al ser destituido por el Papa o al ser promovido al episcopado), pero ese año el papa Pío VII decretó que su duración fuera de seis años en todas las órdenes. Posteriormente el papa Pío IX concedió a la Orden de Predicadores que el cargo fuese para doce años. Durante el mandato del padre Aniceto Fernández OP, 82º Maestro de la Orden, se acordó que la duración del cargo fuera de nueve años.
El logo del Capítulo General
El logo incluye dos detalles: el loto blanco y la capa negra de los frailes dominicos. El significado es el encuentro entre la cultura vietnamita y el espíritu dominico. El loto es uno de los símbolos queridos de los vietnamitas. El loto en el pantano expresa las dificultades humanas y su grandeza valiosa. Esta imagen también representa parcialmente el espíritu de la Orden Dominica en la frontera; para encontrar las circunstancias desgraciadas y llevar el Evangelio.
