La opositora Unidad Nacional Azul y Blanco pide a Francisco que visite el país y actúe como bálsamo Asesinado en Nicaragua el custodio de la Virgen de Montserrat
Opositor y custodio de la Virgen de Montserrat, Noel había declarado públicamente que se acataba al llamado de Brenes para unirse en oración por la Arquidiócesis de Managua, con motivo del ataque a la catedral
El Movimiento 19 de Abril La Concepción, cuyos integrantes conocían personalmente a Hernández, mostró su rechazo al asesinato del joven, y culpó directamente a Ortega y Murillo
Unidad Nacional Azul y Blanco: "Estamos solicitando al papa Francisco que haga gestiones para visitar Nicaragua en un momento cercano. Creemos que su visita será un bálsamo para el sufrimiento que está pasando el pueblo nicaragüense"
Según un informe reciente del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), la Iglesia católica ha recibido 24 ataques en los últimos 20 meses
Unidad Nacional Azul y Blanco: "Estamos solicitando al papa Francisco que haga gestiones para visitar Nicaragua en un momento cercano. Creemos que su visita será un bálsamo para el sufrimiento que está pasando el pueblo nicaragüense"
Según un informe reciente del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), la Iglesia católica ha recibido 24 ataques en los últimos 20 meses
| Rd/EFE
Un opositor y custodio de la Virgen de Montserrat fue asesinado de una paliza en una pequeña ciudad del Pacífico de Nicaragua, informó este jueves la Iglesia católica, cuyos templos sufren una ola de profanaciones que se ha extendido desde julio pasado.
Noel Hernández, de 24 años, falleció anoche luego de 48 horas en estado crítico tras haber recibido una paliza de personas desconocidas en el municipio San Juan de La Concepción, departamento de Masaya, confirmó la parroquia Inmaculada Concepción de María.
"Era prioste de nuestra morenita", agregó, en un comunicado.
El ataque al custodio católico ocurrió tres días después de un incendio que quemó parcialmente la Catedral Metropolitana de Managua, y que calcinó una imagen histórica de la Sangre de Cristo, que fue calificado por el papa Francisco y por el cardenal Leopoldo Brenes como "atentado" y "acto terrorista", aunque la Policía lo archivó como accidente.
Según un informe reciente del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), la Iglesia católica ha recibido 24 ataques en los últimos 20 meses, sin incluir los primeros seis días del presente agosto, todos supuestamente dirigidos por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que lidera el presidente Daniel Ortega, y cuyos desencuentros con el catolicismo data de hace cuatro décadas.
Hasta ahora la PolicíaNacional solamente ha investigado el caso de la Catedral de Managua y su conclusión apoyó la teoría de que el incendio fue causado por una veladora, tal como adelantó la esposa de Ortega, la vicepresidenta Rosario Murillo, minutos después del suceso.
El opositor Movimiento 19 de Abril La Concepción, cuyos integrantes conocían personalmente a Hernández, mostró su rechazo al asesinato del joven, y culpó directamente a Ortega y Murillo.
"Rechazamos la forma como fue salvajemente agredido por personas afines a la dictadura, pues es típico del modus operandi de las huestes asesinas de la dictadura Ortega Murillo", señaló el Movimiento 19 de Abril La Concepción, en una declaración.
"Este asesinato es una muestra más de los planes maquiavélicos del régimen en contra de la Iglesia católica, y que ponen en peligro la paz, la estabilidad de la nación, y de nuestro municipio", agregó el grupo opositor.
El día que fue agredido Hernández, un hijo de dos integrantes del Cabildo de Nuestra Señora de Montserrat, su parroquia había declarado públicamente que se acataba al llamado de Brenes, para unirse en oración por la Arquidiócesis de Managua, con motivo del ataque a la catedral.
Las relaciones entre Ortega y la Iglesia católica están rotas desde 2018, cuando el presidente acusó al Episcopado de "golpista" por su apoyo a los sacerdotes que abrieron las puertas de sus parroquias o mediaron para salvar a miles de manifestantes en ataques armados del Gobierno, que dejaron cientos de muertos, presos o desaparecidos, miles de heridos, y decenas de miles en el exilio.
Último adiós a custodio de la Virgen de Monserrat, muerto a golpes en La Concepción
— IP Nicaragua (@IpNicaragua) August 7, 2020
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La opositora Unidad Nacional Azul y Blanco informó este jueves que pidió al papa Francisco que realice una visita a Nicaragua para que sirva como 'bálsamo al sufrimiento' del país, que vive una crisis sociopolítica y derechos humanos en la que la Iglesia Católica también ha sido objeto de ataques.
'Estamos solicitando al papa Francisco que haga gestiones para visitar Nicaragua en un momento cercano, porque creemos que su visita será un bálsamo para el sufrimiento que está pasando el pueblo nicaragüense, y de manera particular los obispos, sacerdotes, religiosas, y la feligresía católica', explicó a periodistas Violeta Granera, integrante del Consejo Político de la Unidad.
Una visita de Francisco a Nicaragua representaría un alivio para 'un pueblo que está siendo reprimido, para los creyentes, y para toda la sociedad nicaragüense que desea una paz con libertad', dijo, por su lado, el también miembro del Consejo Político de la Unidad Félix Maradiaga.
La Unidad Nacional Azul y Blanco, que agradeció a Francisco por su 'cercanía' con los católicos de Nicaragua, envió la solicitud al pontífice a través del nuncio apostólico en Managua, Waldemar Stanislaw Sommertag.
Nicaragua es el único país de Centroamérica que ha recibido dos visitas papales, en ambas ocasiones de San Juan Pablo II.
El papa polaco visitó Nicaragua por primera vez en 1983, con Daniel Ortega en la Presidencia. Su presencia fue marcada por la reprimenda al recién fallecido sacerdote trapense y poeta Ernesto Cardenal y por el intento de boicot protagonizado por las llamadas 'turbas sandinistas' contra el mensaje público del pontífice.
San Juan Pablo II volvió a Nicaragua en 1996 bajo el Gobierno de Violeta Barrios de Chamorro. En esta visita el papa se arrodilló y oró ante la imagen de la Sangre de Cristo de más de 382 años, que fue calcinada hace seis días, en el incendio parcial de la Catedral de Managua.
El papa Francisco calificó el incendio como un 'atentado', sin embargo, la Policía nicaragüense determinó que se trató de un accidente, tal como lo había anunciado la esposa de Ortega, la vicepresidenta Rosario Murillo, minutos después del suceso.
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