Cierre festivo de la fase diocesana del Sínodo en Xalapa, Veracruz México Clausura del proceso sinodal de Xalapa: "Hacia la vivencia de una 'cultura sinodal'"

Luego de que hace unos meses comenzaran los trabajos de la etapa diocesana del sínodo de la sinodalidad, en el lejano octubre de 2021. El sábado pasado fue el cierre festivo de la etapa diocesana del mismo en la arquidiócesis de Xalapa, ubicada en la zona montañosa central, en el estado de Veracruz en México. Integrada por 93 parroquias, 15 rectorías, las capellanías, el seminario, la vida consagrada, las escuelas, los laicos y los no creyentes.

El proceso sinodal del trabajo se organizó en tres grandes etapas. Primero fue de “conocimiento y capacitación”, en lo que se incluye la propaganda y difusión en el mes de enero y febrero de 2022. Lo que ha incluido las primeras reuniones, la configuración de los equipos y la edición de los formularios de la encuesta. 

Posteriormente se llevó a cabo la “experiencia sinodal”, que corresponde a la consulta, misma que se llevó a cabo en los meses de marzo y abril de 2022, a todos los sacerdotes, a los y las religiosas presentes en la arquidiócesis, a los laicos comprometidos, seminaristas, estudiantes y personas no integradas en movimientos parroquiales. La idea era llegar a todos y por todos los medios.

Luego de esto se llevó a cabo la “Experiencia diocesana”, la que ha implicado la edición de la síntesis y la revisión de la misma con los decanos. Todo desembocó en el encuentro pre-sinodal celebrado el sábado 11 de junio de 2022 en el Auditorio ubicado en la zona del seminario mayor de Xalapa. 

Esta reunión tuvo la característica de ser un evento festivo que integró a todos los miembros de la iglesia de Xalapa: los obispos Jorge Carlos Patrón Wong y el obispo auxiliar José Rafael Palma Capetillo, un numeroso grupo de presbíteros, religiosas, seminaristas de las diversas etapas y laicos venidos de diferentes parroquias. 

El cierre de la etapa diocesana del proceso sinodal comenzó con la entronización de la santísima Virgen y de Jesús eucaristía. Hubo una representación de todos los decanatos, quienes de modo creativo expresaron las ideas clave de la sinodalidad por medio de cuentos, poemas, interpretaciones, danzas, bailes, composición de algunas canciones. Lo cual culminó con la concelebración eucarística cerca de las dos de la tarde. 

Todo esto ha despertado diferentes sueños y desafíos compartidos por la iglesia de todo el mundo. Sentimos la llamada del Espíritu a descubrir el sueño de Dios para la porción de la Iglesia que camina en Xalapa. Sentimos su llamada en la renovación de algunas estructuras pastorales vigentes. En el modo de hacer algunas actividades. También en el caminar juntos.

Esto ha abierto el horizonte pues nos ha dado luces para poder renovar la práctica pastoral en nuestra Iglesia. También descubrimos el reto de integrar a todos en el trabajo pastoral por medio de la acogida y participación. Así como un novedoso y fructífero uso de las plataformas digitales. 

Este ejercicio nos ha permitido ver los cambios a los que es llamado el presbiterio, la vida consagrada y los laicos. En este sentido para ser más sinodal los pasos que debemos dar son la vivencia de una “cultura sinodal”, en la que todos sintamos que somos compañeros de camino, que tengamos el valor de escucharnos y la valentía de hablar claro. 

Esto implica que nuestras celebraciones inspiren nuestra vida comunitaria, al tiempo que nos permita responsabilizarnos de nuestra misión común, en diálogo franco y abierto con la sociedad. En la que todas nuestras decisiones sean precedidas por un serio discernimiento. 

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