Obispos condenan el asesinato de Juan Antonio López y claman por ‘una justicia real’ "Juan no muere, se multiplica": El asesinato del líder hondureño de las CEBs señala una impunidad favorecida por el Gobierno

Juan Manuel López
Juan Manuel López

La noche del 14 de septiembre, el ambientalista Juan Antonio López, líder de comunidades eclesiales de base, concejal y miembro de la Red Eclesial Mesoamericana (Remam), fue tiroteado y muerto

El Estado no atendió debidamente las recomendaciones de la CIDH y las amenazas contra López: los obispos hondureños condenan el asesinato de Juan Antonio López y claman por 'una justicia real'

Era una muerte anunciada: "Las empresas extractivas, las alianzas entre el narcotráfico y los líderes políticos engendran, cada vez, más 'Juanes López' y 'Bertas Cáceres' en nuestros pueblos de Mesoamérica"

La Red Eclesial Ecológica Mesoamericana (Remam) y el Movimiento Laudato Si’ han emitido un comunicado condenando la violenta muerte de este laico y la falta de acción del Estado hondureño

La noche del 14 de septiembre, tras salir de la celebración de la Palabra de Dios, Juan Antonio López, líder de comunidades eclesiales de base, concejal y miembro de la Red Eclesial Mesoamericana (Remam), fue asesinado.

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Su muerte era 'una muerte anunciada', pues dedicó su vida a la defensa de los bienes comunes, el medio ambiente y la lucha contra la corrupción. De hecho, en una entrevista a AFP en 2021, había comentado: “Cuando uno sale de su casa siempre tiene en mente que no sabe qué le puede pasar”.

Tras el asesinato, la Comisión Nacional de Pastoral Familiar de la Iglesia Católica de Honduras expresa su más profundo pesar.

La vida de López, a pesar de contar con medidas de protección del Mecanismo de Protección para defensores, periodistas y abogados, y medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), fue truncada violentamente. 

Ante esta valiosa perdida, la Comisión, a través de un pronunciamiento emitido este 15 de septiembre, denuncia la destrucción del medio ambiente y la grave falta de protección para los más vulnerables. Además, llama a mantener la esperanza y a trabajar por un respeto generalizado a la vida, la familia, los derechos humanos y el medio ambiente.

Testigo de Cristo en la lucha por la justicia y la paz

También, la Comisión reflexiona sobre “la cultura de la vida” y la “cultura de la muerte», repudiando la muerte de Juan Antonio López, y piden que esta no quede impune.

A su vez, considera que hay una falta protección de las familias hondureñas, especialmente de los más vulnerables, quienes se enfrentan a amenazas que pueden costarles la vida.

"La Comisión hace un llamado a no permitir que la preocupación por la justicia y el medio ambiente prive de la esperanza de un mundo nuevo"

La Comisión hace un llamado a no permitir que la preocupación por la justicia y el medio ambiente prive de la esperanza de un mundo nuevo: “Caminamos por esta tierra buscando a Dios y confiados en Él”, asegura, y refleja el compromiso de la Comisión Nacional de Pastoral Familiar para enfrentar la violencia y promover una cultura de paz: “Esperamos que en nuestro país se pueda respetar la vida, la familia, los derechos humanos y del medio ambiente, todos estamos llamados a ser constructores de un mundo nuevo”, concluye el pronunciamiento.

Conferencia Episcopal de Honduras: "Vil Asesinato"

Por su parte, la Conferencia Episcopal de Honduras (CEH) ha emitido un mensaje al pueblo hondureño este 15 de septiembre.

Los prelados comunicaron su tristeza por el violento suceso y reconocen al ambientalista como “Delegado de la Palabra de Dios, Coordinador de la Pastoral Social de la Diócesis de Trujillo, Miembro Fundador de la Pastoral de Ecología Integral a nivel nacional, defensor de la Casa Común, un hombre comprometido con la verdad, honesto y valiente.

"Este hecho doloroso es un duro golpe para su familia, para la Iglesia diocesana de Trujillo, en particular, y para nuestra Iglesia en Honduras, en general"

Citando el Evangelio de San Marcos del pasado domingo,  consideran que “la Providencia Divina ha querido que esta Palabra acompañase la muerte de Juan Antonio, porque al ser asesinado al salir de la celebración de la Palabra de Dios, fue lo último que escuchó y predicó este hermano nuestro, quien con obras concretas nos demostró su fe”.

Como pastores de la Iglesia que peregrina en Honduras, repudiaron enérgicamente “este vil asesinato y pedimos a las autoridades que no sólo se hable de justicia, sino que se trabaje diligente y sinceramente en el deber de garantizarla a todos los ciudadanos”.

El mensaje – suscrito por Mons. José Vicente Nácher, arzobispo de Tegucigalpa y Presidente de la CEH – finaliza con una petición a todos los hermanos sacerdotes: “Que se ofrezcan Misas en sufragio del alma de nuestro hermano Juan Antonio, y pedimos a nuestros fieles que se eleven oraciones por él, que ha sido un verdadero discípulo y misionero”.

Red Eclesial Ecológica Mesoamericana y Movimiento Laudato Si’: "Juan no muere, se multiplica"

La Red Eclesial Ecológica Mesoamericana (Remam) y el Movimiento Laudato Si’ han emitido un comunicado condenando la violenta muerte de este laico y la falta de acción del Estado hondureño. Puesto que él venía siendo amenazado desde hace años. También el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam) hizo un pronunciamiento.

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"El ambientalismo latinoamericano está de luto: Juan Antonio López fue asesinado en Honduras este sábado 14 de septiembre"

Iglesia, solidaria

Ambas organizaciones destacaron la profunda fe y compromiso, amén de las amenazas que enfrentó desde hace años este líder ambientalista.

Plantearon que el asesinato de López fue “un mecanismo para silenciar las voces de los lideres comunitarios que, como él, luchan por el bien común frente a intereses económicos y políticos que recurren al asesinato como instrumento”.

"Cada vez más, las empresas extractivas, las alianzas entre el narcotráfico y los líderes políticos como también 'el actual modelo económico tecnocrático y, en esencia, el sistema de muerte', engendran más 'Juanes López' y 'Bertas Cáceres' en nuestros pueblos de Mesoamérica"

No se trata de un hecho aislado. Cada vez más, las empresas extractivas, las alianzas entre el narcotráfico y los líderes políticos como también “el actual modelo económico tecnocrático y, en esencia, el sistema de muerte, engendran más ‘Juanes López’ y ‘Bertas Cáceres’ en nuestros pueblos de Mesoamérica”.

En el pronunciamiento afirman que “son siglos de certeza y de demostración de la fidelidad del Dios de la Vida, que siempre cumple su promesa: ‘la sangre de los mártires es semilla de cristianos’. Por eso, nuestra gratitud infinita por las enseñanzas que Juan nos dejó”.

"La Remam y el MLS se declaran en luto, pero también reivindican su espíritu de lucha afirmando que 'no están derrotados', mientras que a los violentos les dicen: 'Juan no muere, se multiplica'"

Dichas enseñanzas “nos fortalecen, nos unen y nos acercan más a la Santísima Trinidad, haciéndonos más fuertes en la eclesiología sinodal, con la fuerza de la memoria pascual de Cristo Nuestro Señor, el Príncipe de la Paz, quien ha coronado de gloria a Juan y le ha concedido sus bienaventuranzas”.

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Una muerte anunciada

El trabajo de Juan Antonio López ha sido reconocido por distintas organizaciones internacionales, e incluso gozaba de medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde 2023, dado que recibía amenazas desde hacía tres años, pues su labor incomodaba a distintos intereses.

"Lamentablemente, el Estado hondureño no atendió debidamente las recomendaciones de la CIDH y las amenazas contra López se concretaron el pasado sábado"

De hecho, en una entrevista a AFP en 2021, él había dicho:Cuando uno sale de su casa siempre tiene en mente que no sabe qué le puede pasar y si puede volver a su casa, y si puede volver a ver a la familia”.

Lamentablemente, el Estado hondureño no atendió debidamente las recomendaciones de la CIDH y las amenazas contra López se concretaron el pasado sábado, dos días después de haber pedido la renuncia del alcalde de Tocoa, Adán Fúnez, por sus supuestos vínculos con el narcotráfico.

Por otra parte, la lucha de López ya había sido criminalizada por el Estado hondureño, que en 2018 lo había acusado de los supuestos delitos de incendio agravado, privación de la libertad y asociación ilícita.

Aunque el ambientalista fue liberado en poco tiempo, los procesos continuaban, además que el hostigamiento de la policía y de otras figuras de poder continuaban a la par de las amenazas. En síntesis, parecía la crónica de una muerte anunciada.

Conmoción y tristeza expresó el Celam ante el asesinato de Juan Antonio  López, miembro de Red Eclesial Mesoamericana-Honduras - ADN Celam

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