Están en huelga de hambre por sus hijos, presos políticos La Policía de Nicaragua mantiene sitiada una iglesia donde madres hacen ayuno
La Policía Nacional ha reforzado su cerco alrededor de ese templo, al que las autoridades cortaron el agua y la luz
El cardenal Brenes ha dicho que el papa Francisco ha pedido al Gobierno del presidente Daniel Ortega que escuche las demandas de las madres
Trece jóvenes que llevaron agua a las mujeres la noche del jueves fueron capturados por la Policía y llevados a la cárcel "El Chipote", en Managua, señalada como centro de torturas del Gobierno
Trece jóvenes que llevaron agua a las mujeres la noche del jueves fueron capturados por la Policía y llevados a la cárcel "El Chipote", en Managua, señalada como centro de torturas del Gobierno
| EFE
La Policía de Nicaragua mantiene este domingo sitiada la iglesia San Miguel Arcángel en Masaya (sureste) donde madres de los denominados "presos políticos" se encuentran en huelga de hambre desde el jueves pasado para pedir la liberación de sus hijos, confirmó el cardenal nicaragüense Leopoldo Brenes.
La Policía Nacional ha reforzado su cerco alrededor de ese templo, al que las autoridades cortaron el agua y la luz desde que 10 madres de "presos políticos" comenzaron con ese ayuno, y cuya cancelación de servicios básicos fue condenada por la Arquidiócesis de Managua, Masaya y Carazo, a cargo de Brenes.
El cardenal no puede ingresar a la iglesia
Las autoridades policiales, además de impedir la entrada y salida de la parroquia, o su acercamiento, no permiten el ingreso de agua, alimentos y medicinas, según han denunciado familiares, sacerdotes, grupos de oposición y medios de comunicación.
"Estamos haciendo las gestiones debidas, porque no se puede ingresar (al templo) así no más", explicó a periodistas el cardenal Brenes. El jerarca afirmó que están haciendo las gestiones para poder ingresar a la parroquia: "cuando tengamos la oportunidad, vamos a ir".
Instó, además, a las instituciones encargadas de la distribución del agua y electricidad a que restablezcan esos servicios como "un gesto de humanidad".
Están acompañadas por la defensora Yonarqui Martínez, conocida en Nicaragua como "la abogada de los presos políticos" en medio de la crisis sociopolítica que atraviesa el país
El Papa Francisco aboga por los presos
Asimismo, el cardenal Brenes dijo que el papa Francisco pidió al Gobierno del presidente Daniel Ortega que escuche las demandas de las madres y libere a los 152 "presos políticos". "El santo padre de manera muy privada lo ha hecho (esa solicitud al Gobierno) y ojalá pues que se pueda escuchar la voz del santo padre y pronto esas madres puedan tener a esos hijos en sus hogares, de manera especial en Navidad", señaló.
Las madres que se encuentran en huelga de hambre son acompañadas por el párroco de la iglesia San Miguel Arcángel, el sacerdote Edwin Román, y la defensora Yonarqui Martínez, conocida en Nicaragua como "la abogada de los presos políticos" en medio de la crisis sociopolítica que atraviesa el país. Además es apoyada por los excarcelados Santiago Fajardo y Marlon Powell.
Policía: "Se van a morir"
Las madres han presentado debilidad por el ayuno, mientras el sacerdote de la parroquia que las acoge, quien es diabético, presenta deshidratación, según han informado ellos mismos a través de un audio enviado a la prensa.
Según la defensora Martínez, los policías que rodean el templo les han dicho: "se van a morir". Un grupo de periodistas, incluyendo corresponsales de prensa extranjera, no pudieron acercarse a la iglesia porque la Policía ha puesto retenes en las calles de acceso, además por la presencia de seguidores de Ortega en plan de amenazas a los comunicadores, según denunciaron.
Trece jóvenes que llevaron agua a las mujeres la noche del jueves fueron capturados por la Policía y llevados a la cárcel "El Chipote", en Managua, señalada como centro de torturas del Gobierno, donde permanecen recluidos.
84 horas de ayuno
Las madres cumplieron esta tarde 84 horas de reclamo pacífico en esa parroquia ubicada en la ciudad de Masaya, 28 kilómetros al sureste de Managua, uno de los focos de resistencia contra el Gobierno en el marco de la crisis que estalló en abril de 2018.
La Policía Nacional no ha explicado la razón de su presencia alrededor de ese simbólico templo ni por qué impide el acceso al lugar.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que también condenó el sitio policial, al menos 328 personas han muerto desde el inicio de la crisis política en Nicaragua en abril de 2018, aunque organizaciones locales cuentan hasta 651, mientras el Gobierno de Ortega admite 200 y alega defenderse de un intento de "golpe de Estado".